Gobierno chileno busca recuperar centro de tortura conocido como "venda sexy"

  • El Gobierno chileno se comprometió hoy a recuperar la llamada casa "venda sexy" donde agentes represores de la dictadura militar practicaban la tortura sexual a hombres y mujeres a quienes se les vendaba la vista, motivo por el cual el centro era conocido con ese sobrenombre.

Santiago de Chile, 13 jun.- El Gobierno chileno se comprometió hoy a recuperar la llamada casa "venda sexy" donde agentes represores de la dictadura militar practicaban la tortura sexual a hombres y mujeres a quienes se les vendaba la vista, motivo por el cual el centro era conocido con ese sobrenombre.

"El Gobierno considera posible recuperar la casa de tortura para el patrimonio fiscal por lo que el compromiso está hecho", declaró a Efe la portavoz de la Asociación Casa de Tortura Venda Sexy, Beatriz Bataszew.

La entidad había presentado una solicitud formal ante el Ministerio de Bienes Nacionales para que el recinto donde se torturó y asesinó durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) fuera recuperado por parte del Ejecutivo.

"La reunión ha sido extremadamente positiva" comentó Bataszew, tras un encuentro con el ministro de Bienes Nacionales, Víctor Osorio.

En la actualidad la casa, que se encuentra en plena remodelación, pertenece a una empresa privada por lo que "el ministro no tiene la facultad para personarse y paralizar las obras", acotó la dirigente.

La próxima semana las víctimas y familiares de los que fueron asesinados se reunirán con el juez de la Corte de Apelaciones de Santiago, Hernán Crisosto, para tratar de paralizar la remodelación.

"Recuperar la casa es una forma de reparación simbólica para las personas que fuimos víctimas y para la comunidad circundante", explicó la representante de los afectados.

Una vez recuperada, la asociación espera crear un espacio para la memoria "donde poder fortalecer los principios de inviolabilidad de los derechos humanos y la convivencia" tal y como ha ocurrido con otros recintos que la dictadura utilizó para torturar y hacer desaparecer opositores, explicó Bataszew.

Durante la dictadura de Augusto Pinochet, unos 3.200 chilenos murieron a manos de agentes del Estado, de los que 1.192 están aún como detenidos desaparecidos.

Además, unos 33.000 chilenos fueron torturados y encarcelados por causas políticas durante el régimen militar.

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