Guardia Civil seguía la pista al clan de narcos gallego desde finales de 2010

  • La Guardia Civil le venía siguiendo la pista a la red de narcotraficantes desarticulada en el marco de la "Operación Medusa", que tenía su base de operaciones en un laboratorio casero para la elaboración y distribución de cocaína ubicado en Cambados, desde finales de 2010.

Pontevedra, 12 ago.- La Guardia Civil le venía siguiendo la pista a la red de narcotraficantes desarticulada en el marco de la "Operación Medusa", que tenía su base de operaciones en un laboratorio casero para la elaboración y distribución de cocaína ubicado en Cambados, desde finales de 2010.

En total han sido detenidas ocho personas, siete españoles y un panameño, e intervenidos 10 kilos de cocaína, además de diverso material para adulterar la droga, dinero en metálico, coches de alta gama y armas de fuego, informó una nota del instituto armado.

La operación, desarrollada en Galicia y Andalucía, comenzó a finales de 2010, cuando la Guardia Civil detectó a un grupo de personas establecidas en Galicia que manipulaba y envasaba importantes cantidades de cocaína, que posteriormente distribuía por el resto de España con sus propios logotipos.

Las primeras gestiones pusieron a los investigadores tras la pista de un grupo de personas establecidas en la comarca pontevedresa del Salnés, sobre las que se centraron los agentes para establecer su grado de participación e implicación de ellos en el transporte, adulteración y distribución de la droga.

En los primeros meses de 2011 fueron detenidas en diferentes fases cuatro personas e intervenidos 2,6 kilos de cocaína cuando los investigadores detectaron varios traslados de droga en vehículos provistos de dobles fondos artesanales.

A partir de entonces, el grupo disminuyó sus actividades y comenzó a adoptar importantes medidas de seguridad, tanto en los desplazamientos como en las relaciones entre los miembros de la red y con otras personas interesadas en su actividad delictiva.

La nueva forma de actuar del clan consistía en trasladar la droga, tras su adquisición a otros intermediarios, a un local muy próximo al domicilio del cabecilla, donde era mezclada con otros productos para obtener una mayor cantidad.

Posteriormente, la sustancia estupefaciente era nuevamente envasada al vacío y marcada con los propios sellos de la organización, diferentes en cada caso, en función del grado de pureza, y luego era distribuida a diferentes partes del territorio nacional a través de los correos de la red.

En la última fase de la "Operación Medusa", los agentes han detenido a cuatro personas residentes en las localidades pontevedresas de Cambados, Vilanova y Vilagarcía de Arousa, en cuyos domicilios y propiedades se realizaron varios registros.

Entre el material incautado figuran 7,5 kilos de cocaína, diversas armas de fuego, varios vehículos de alta gama y uno clásico, dinero en efectivo, una máquina contadora de billetes, sustancias para el corte y adulteración de la droga y una prensa hidráulica de 30 toneladas.

La "Operación Medusa" estuvo coordinada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Vilagarcía de Arousa y el Fiscal Antidroga de Pontevedra, y las investigaciones corrieron a cargo del equipo contra el crimen organizado de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil con sede en Pontevedra. EFE

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