París, 31 dic.- El presidente de Francia, François Hollande, anunció hoy la liberación del sacerdote francés Georges Vandenbeusch, secuestrado el pasado mes de noviembre en Camerún.
Hollande no ofreció detalles sobre la liberación del religioso católico, de 42 años, pero agradeció en un comunicado su ayuda a las autoridades de Camerún y de Nigeria y en especial al presidente camerunés, Paul Biya.
El ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, viajará a Yaundé para acompañar al exrehén en su regreso a Francia, agrega la nota de la presidencia francesa.
Hollande recibirá mañana al religioso a su llegada a París, aunque aún no se conoce la hora, informó el Palacio del Elíseo, sede de la Presidencia gala.
Vandenbeusch, que se trasladó a Camerún en 2011, fue secuestrado el pasado 13 de noviembre en el norte de ese país, en el monasterio de Nguetchewe, cerca de Koza, una localidad situada a 30 kilómetros de la frontera nigeriana.
Los servicios diplomáticos franceses habían alertado del peligro en la zona para los ciudadanos galos, después de que en febrero fueran secuestrados allí siete miembros de la familia francesa Moulin Fournier, liberados dos meses después.
El rapto del sacerdote fue reivindicado por el grupo radical islámico Boko Haram, sin que haya trascendido que pidiera ningún rescate.
Las autoridades francesas sospechaban que el rehén había sido trasladado por sus captores a Nigeria.
Tras conocerse la noticia de la liberación, Gérard Daucourt, el obispo de Nanterre, diócesis en la que ejercía Vandenbeusch antes de trasladarse a Camerún, señaló a los medios de comunicación que el religioso ha podido informar de que se encuentra bien y que su secuestro no estuvo motivado por su fe religiosa.
El obispo dijo que los servicios diplomáticos no le han informado sobre si se pagó un rescate o se produjo un intercambio de prisioneros para lograr la liberación de Vandenbeusch.
"Aunque el secuestro no ha sido muy largo, parece que no se vuelve como se fue. Sin duda, habrá que darle tiempo para superar todo esto", añadió el religioso.
Hollande recordó que aún hay seis ciudadanos franceses secuestrados en Mali y Siria y aseguró que el Gobierno trabaja para lograr su liberación.
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