Nueva Delhi, 2 sep.- Un tribunal indio ordenó hoy el ingreso en prisión de un destacado líder espiritual hindú del gigante asiático, bajo la acusación de haber agredido sexualmente a una adolescente, informó una fuente oficial.
Asaram Bapu, de 72 años de edad, había sido arrestado ayer por las fuerzas del orden y hoy un magistrado de distrito de la ciudad occidental de Jodhpur dictó dos semanas de custodia judicial, explicó un funcionario de prisiones a la agencia local IANS.
Según los medios locales, se han registrado algunos enfrentamientos entre seguidores del gurú y la policía en las inmediaciones de la cárcel de Jodhpur en la que ha sido recluido.
La presunta agresión a la adolescente, de 16 años, sucedió el pasado 15 de agosto en un "ashram" (centro de meditación) propiedad de Bapu en las afueras de la mencionada ciudad, pero tanto él como sus fieles han negado hasta la fecha que tal incidente ocurriera.
La sociedad india vive en un estado de gran psicosis ante la continua aparición en la prensa local durante los últimos meses de aberrantes casos de violaciones.
El detonante de esta psicosis fue la brutal violación en grupo de una estudiante de fisioterapia de 23 años en un autobús de Nueva Delhi en diciembre de 2012.
La joven falleció trece días después de la agresión y el crimen generó un debate sin precedentes en el país sobre la situación de discriminación que vive la mujer que llevó a las autoridades a endurecer las penas contra los violadores.
El gurú Bapu realizó precisamente poco después de aquellos hechos unas declaraciones que suscitaron mucha polémica, al considerar que, aunque menor que los agresores, la víctima también tuvo culpa, ya que en vez de resistirse "debía haber rezado a Dios y pedido a los atacantes que la dejaran en paz".
Un tribunal de justicia juvenil de Nueva Delhi condenó este sábado a tres años de reclusión en un correccional al menor implicado en el caso de la violación mortal en el autobús.
Otros cuatro acusados están siendo juzgados por un tribunal regular y se enfrentan a una posible pena de muerte, mientras que otro acusado más, el presunto cabecilla del grupo, se suicidó en la cárcel según la versión oficial.
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