Investigan ataque armado a blindado policial en zona donde opera la guerrilla

Asunción, 28 jul.- Las fuerzas militares y policiales paraguayas investigan hoy la autoría del ataque con disparos a un blindado de la Policía ocurrido el domingo en Arroyito (norte), donde el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) secuestró hace más de dos meses a un menor, al que todavía no ha liberado.

El teniente coronel Víctor Urdapilleta, portavoz de la Fuerza de Tarea Conjunta, dijo a Efe que no se descarta que detrás del ataque esté el EPP, aunque reconoció que hasta el momento no se ha podido determinar la identidad de los atacantes.

"No se descarta nada y desde esta mañana se realizan los trabajos de inspección en la zona", declaró el militar.

Según la fuente, el suceso se produjo cuando una patrulla policial a bordo de un vehículo blindado circulaba por el interior de una hacienda en Arroyito, en el departamento de Concepción, donde investigaban una denuncia por robo de ganado.

"El vehículo quedó entonces empantanado y cuando los policías trabajaban para resolver la situación se hizo de noche y ocurrieron los disparos", indicó el teniente coronel, quien confirmó que no se produjeron heridos.

Arroyito es una de las zonas de influencia del EPP y el lugar donde secuestró a Arlan Fick, de 16 años, de cuyo cautiverio se cumplen hoy 117 días.

Días después del secuestro, la familia reveló que pagó un rescate de 500.000 dólares, además de distribuir alimentos por otros 50.000 dólares y divulgar un video propagandístico, como le exigió la guerrilla, que sin embargo no cumplió el trato.

Sobre el secuestro, Urdapilleta declaró que "no hay ningún dato al respecto" y agregó que "seguimos realizando operaciones diurnas y nocturnas para dar con el rastro del grupo criminal y del secuestrado".

El pasado mayo, Alcides Oviedo, un líder histórico del EPP que está encarcelado por secuestro desde 2004, condicionó en una carta la entrega de Fick a la liberación de los presos de ese grupo.

Fick ha superado el tiempo en cautiverio del ganadero Fidel Zavala, quien fue secuestrado el 15 de octubre de 2009 y liberado 94 días después tras el pago por parte de la familia de un rescate de 550.000 dólares.

Las autoridades paraguayas calculan que la guerrilla estaría formada por unos 30 o 40 miembros, aunque admiten que la cifra está basada en "especulaciones".