Madrid, 2 ene.- El diputado de IU Gaspar Llamazares ha criticado hoy a la empresa Sacyr Vallehermoso, que lidera el consorcio encargado de la ampliación del Canal de Panamá, por suspender las obras alegando sobrecostes de las mismas, y ha dicho que esa decisión es un "muy mal paso" que da "mala prensa" a España.
En rueda de prensa en el Congreso, Llamazares se ha referido al anuncio del Grupo Unidos por el Canal (GUPC) de suspender las obras debido a la imposibilidad de llevarlas a cabo con los costos pactos inicialmente en el contrato.
"No nos da buena prensa a nivel internacional y además en un mercado emergente y tan importante como es América Latina", se ha quejado Llamazares, en cuya opinión es "un mal paso, muy malo".
La "Marca España", ha subrayado Llamazares, debería ser solvente y rigurosa y, cuando va a un concurso, sobre todo internacional, debe hacer una oferta que pueda cumplir y "no una que quiera a mitad de camino negociar o romper".
A su juicio, Sacyr no demuestra que tenga ningún "compromiso social" y da "mala prensa" a las empresas españolas, que tienen que tener otros criterios más "rigurosos" y "otra sensibilidad social".
"Cuando alguien acude a un concurso debe cumplir con el contrato", ha sentenciado, para recordar que IU nunca ha estado de acuerdo con las llamadas "bajas temerarias" ni con "mecanismos posteriores de maquillaje" que permitan aumentar sustancialmente el precio inicial de un concurso.
Una práctica que, según Llamazares, parece haberse convertido en "norma" por parte de las empresas de construcción en España durante los años de la "burbuja inmobiliaria", pero que tiene que cambiar.
Llamazares ha puesto en duda, por otra parte, las declaraciones del ministro de Economía, Luis de Guindos, relativas a que España creará empleo en el 2014, y ha considerado que se trata de un anuncio "difícilmente creíble" teniendo en cuenta las medidas de "ensañamiento social que está tomando el Gobierno".
En este sentido, ha precisado que con la subida de los precios, incluso de los servicios públicos, y la bajada de los salarios, se está llevando al país a un "empobrecimiento" en el que "no hay" posibilidad de crear empleo, y "mucho menos" que sea de calidad.
Ahora bien, ha advertido al Ejecutivo de que se está preparando para los próximos meses una "rebelión" de los españoles, una "rebeldía ciudadana frente al ensañamiento del Gobierno" y de que se está construyendo también una "alternativa de izquierdas" que conecte con las aspiraciones sociales en materia económica y de derechos civiles.
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