Juan Marín: "¿Unas nuevas elecciones en Andalucía? Es una posibilidad real"

    • El líder andaluz de Ciudadanos condiciona el diálogo para la investidura a que Díaz acepte sus medidas contra la corrupción.
    • "Aún no nos ha llegado ninguna propuesta. Las dificultades son extremas", asegura.
    • "No sé si Rivera será el candidato. Pero debe serlo", dice sobre el futuro del presidente de su partido.
Juan Marín, presidente del grupo de Ciudadanos en el Parlamento de Andalucía
Juan Marín, presidente del grupo de Ciudadanos en el Parlamento de Andalucía

Juan Marín (Sanlúcar de Barrameda-Cádiz, 1962) no es ni mucho menos un recién llegado a la política. Teniente de alcalde de su ayuntamiento local desde 2007, tras un acuerdo con el PSOE, sí fue en cambio el primero en entrenar el músculo electoral de Ciudadanos en las pasadas elecciones andaluzas. Sus nueve diputados volcaron al resto de formaciones a la estrategia del ataque y pusieron a Díaz contra las cuerdas del diálogo. En cuenta atrás para la investidura, Marín reitera que su 'no' sólo lo cambia que los socialistas acepten el decálogo contra la corrupción que su partido les presentó hace semanas. Aclara que aún no ha recibido la propuesta en la que, supuestamente, la presidenta andaluza asume algunas de sus condiciones, y que sí le ha sido remitida a Podemos. "A nosotros no nos ha llegado nada. En su caso, tendríamos que valorarlo", dice con prudencia.

Susana Díaz ha defendido hoy que se desbloqueen las listas electorales, ¿lo entienden como un guiño a su demanda de listas abiertas?

Evidentemente lo es, en todo su contenido. Esa es una de las cuestiones que hemos estado planteando para la democratización de los partidos políticos, tanto las primarias como las listas abiertas donde se pueda elegir a sus representantes libremente. Son pasos importantes que se están empezando a dar, no sólo desde Ciudadanos, sino también desde otros partidos, como el PSOE.

También está convencida de que en unos días será presidenta…

No sé de donde viene este optimismo porque las dificultades ahora mismo son extremas. Todos nos hemos posicionado en un 'no' a la investidura. Y en nuestro caso, porque no se nos ha respondido a ese pacto anticorrupción que planteamos el 4 de abril y que, según las últimas informaciones de hoy, parece ser que el PSOE estaría en disposición de aceptar… De momento, a nosotros no se nos ha hecho llegar ningún documento por escrito. Y en ese caso, tendríamos que valorarlo.

¿Siendo así se podría llegar a acuerdos?

Ciudadanos estaría dispuesto a sentarse a hablar de acuerdos puntuales. Nosotros no nos planteamos en ningún caso apoyar un programa y un proyecto que es el del PSOE, pero sí poder entrar en un acuerdo para empezar una legislatura. Si se habla de reactivación económica, de un pacto andaluz por la productividad, de reponer personal en la educación pública y la educación, que se eliminen esos cargos nombrados por intereses políticos en las distintas administraciones y que deberían estar ocupados por profesionales… Si esto ocurre, podríamos plantearnos facilitar la investidura. No otra cosa. Pero la verdad es que no tiene muchos visos de que eso se pueda producir. Sí que es verdad que estamos consiguiendo mucho más en pocos días para los ciudadanos andaluces que otros partidos en años en la oposición.

¿Sería deseable que Andalucía se viese abocada a otros comicios?

Deseable no es, porque Ciudadanos no persigue ningún rédito político con un posicionamiento contrario a la investidura. Eso no es bueno para nadie, ni para los partidos políticos ni para el conjunto de la sociedad andaluza. Pero sí es una posibilidad real, a la que nos hemos visto abocados todos por unas elecciones anticipadas que el PSOE tomó la decisión de llevar a cabo y que han producido un cambio en el escenario andaluz. Ahora bien, creo también que la apisonadora ha frenado y está empezando a producirse un cambio, que se ha entendido que hay que dialogar, que hay que debatir, que hay que consensuar, que somos cinco formaciones políticas y no sólo dos pueden pasar por encima de los demás y fiscalizar la gestión. Ese cambio se está produciendo con los anuncios de los últimos días.

Vistas las dificultades para la investidura ¿La ingobernabilidad es posible?

No lo entiendo así. Creo que todos somos lo suficientemente capaces de utilizar el sentido común y la responsabilidad a la hora de poner encima de la mesa todos los asuntos importantes que Andalucía necesita. Se puede gobernar desde la oposición y haciendo propuestas, en primer lugar para reactivar la economía de Andalucía. Coincidimos en los diagnósticos con otras formaciones políticas, tanto con el PP, como con Podemos, e incluso con el PSOE. Y si somos capaces de poner las soluciones y consensuarlas, entonces, se puede ser gobernable. Tenemos que salir de esa política del siglo XX, donde la aritmética hacía que los programas se impusiesen a las razones y a los argumentos. Andalucía tiene 109 parlamentarios de cinco formaciones políticas, que, por encima de todo, tenemos un interés: que el empleo se reactive en Andalucía, que Andalucía funciones. No podemos mantener una tasa de desempleo del 36%, ni un fracaso escolar del 27%, ni que el 96% de las empresas sean de menos de 9 trabajadores. Tenemos que dejar aparte los intereses de los partidos, y lo de las ideologías de izquierda y derecha.

¿Cómo valoran que el presidente del Parlamento haya bloqueado su asignación de personal?

Creo que ha sido una cuestión, según lo que se nos transmitió, más de carácter técnico. Él esperaba una propuesta por escrito. Pero confío en que se solucione.

Chaves les acusó a ustedes de chantaje y Díaz dice que fue una decisión personal ¿A quién creen ustedes? ¿Hubo presiones?

No lo sé sinceramente. No creo que Susana Díaz haya tenido siquiera que llegar a esos planteamientos. Pero creo que Manuel Chaves se equivoca: no estamos chantajeando a nadie. Nosotros no hemos puesto nombres ni apellidos. Simplemente, hay un decálogo donde el punto número uno dice que ningún imputado por corrupción política podrá estar representándonos en ninguna administración, sea una comunidad, un ayuntamiento, una diputación o el Senado. La exigencia que hace Ciudadanos es la misma que se aplica a sí mismo y que lleva en sus estatutos.

Con la marcha de Chaves y Grilán, ¿cuál es ahora su línea roja?

Ahora ponemos un programa encima de la mesa, que es sobre lo que tenemos que hablar si recibimos el documento que se dice nos hará llegar Susana Díaz. Cuando tuvimos el primer encuentro en San Telmo, ella me preguntó por nuestro posicionamiento, sobre si la apoyaríamos en la investidura y le dijimos que no, porque no era nuestro programa ni nuestro proyecto. Hay que hacer las cosas de otra manera. Ir a otro modelo, a un modelo productivo para Andalucía que realmente acabe con las desigualdades, que cada vez son más. Creo que nuestra única línea roja era ser capaces de sentarnos. Si realmente existe esa voluntad y esas ganas de cambiar las cosas, eso será un punto de encuentro que luego permitirá acuerdos a lo largo de la legislatura. Pero habrá que ir evaluándolo, porque Ciudadanos no firma talones en blanco. Nosotros cumplimos lo que decimos y no venimos a cambiar ningún tipo de consejería por unos votos. Creo que eso es lo importante y nos sentimos satisfechos en el sentido de que estamos viendo cambios, también en el Gobierno de la Nación, cuando hace unos días la ministra Fátima Bañez anunció una serie de propuestas para los autónomos, el plan de incentivos que nosotros llevamos proponiendo mucho tiempo. Pues nos ha encantado escucharlo. Muchas de las propuestas que ponemos encima de la mesa están empezando a calar. En el sentido de construir, no de destruir. Nosotros no venimos a destruir nada.

Hay quien les acusa a ustedes también de evitar ahora los pactos como estrategia de cara a las generales…

No sé si pactar ahora con PP o PSOE sería realmente o no un obstáculo para las generales, ni cómo lo valorarían los ciudadanos. Pero ese no es el objetivo de no pactar. El tema es pactar para qué, ni siquiera con quién. El 27% de los ciudadanos considera que Ciudadanos es un partido de centro izquierda, otro tanto que de centro derecha… no sé con quién nos convendría más un supuesto pacto.

Lo de pactar para qué suena a que no habrá alianzas de Gobierno. ¿Reiteran que sólo gobernarán si ganan unas elecciones?

Sí. Creo que lo importante es que las cosas sirvan y Ciudadanos está aquí para gobernar desde la oposición, o si gana, desde las instituciones. No tenemos miedo al diálogo, y eso no implica ir a la política del siglo pasado, que es la que se ha estado practicando hasta ahora.

Las últimas encuestas les dan incluso por encima de Podemos, ¿cómo está el ánimo en el partido?

Pues muy ilusionados. La gente está muy volcada con el proyecto, el ánimo es tremendo y la cohesión del partido fantástica. También tengo que decir que hemos tenido dificultades con el control interno en algunas poblaciones, pero los problemas se corrigen. Las agrupaciones, los simpatizantes, los colectivos sociales con los que hablamos a diario nos animan en esta línea.

Habla usted de miembros expulsados por comentarios xenófobos, por pertenecer a grupos ultraderechistas… ¿Es un problema que les preocupa?

Es un riesgo, es verdad. Crecer tan rápido tiene sus riesgos. Y hay que poner las herramientas necesarias para que se puedan detectar y se reaccione. En cuanto hay alguna información que pueda ser dudosa la pasamos a analizar y si hay que aparta a alguna persona se aparta de forma inmediata.

El tiempo se le ha vuelto en contra a Podemos. ¿Cómo piensan mantener el empuje de aquí a final de año?

La verdad es que Podemos empezó con unas expectativas que incluso aquí superaban ampliamente los resultados que tuvieron. Hay que dar un mensaje más nítido a los ciudadanos, con propuestas sensatas. Los ciudadanos ya no se creen todo, tienen mucho más interés por la política.

¿Vería posible algún acuerdo con Podemos?

No lo veo. En los diagnósticos podemos coincidir, pero en la toma de decisiones y propuestas lo veo complicado. Sí podemos estar de acuerdo en cosas de sentido común… Presentamos una ley de segunda oportunidad, también propusimos que se pueda abrir una bolsa de vivienda para el alquiler social… Pero para acuerdos de gobernabilidad estamos ahora mismo en puntos muy equidistantes. No lo sé, también escuché al señor Pablo Iglesias decir que eran un partido de centro. Si se siguen acercando… pero tienen que acercarse mucho.

¿Y acuerdos con el PP?

Sí son posibles. De hecho últimamente aquí también hemos tenido contactos con otros grupos políticos, no solamente con el PSOE, y concretamente con Juanma Moreno he tenido la ocasión de hablar. Creo que estamos en una zona de equilibrio, donde cada vez más todos los partidos políticos estamos posicionándonos en temas de interés general, donde luego nos podamos entender en lo importante. En eso soy optimista.

¿Ve factible un pacto PP-PSOE para frenarles a ambos?

Me lo preguntaron antes de la campaña y dije que no. Y sigo creyendo que no. Hoy a Podemos y Ciudadanos es difícil frenarlos. No se trata de luchar contra Ciudadanos o contra Podemos, sino contra la corrupción y el desempleo. Hace un tiempo se decía que éramos marcas 'blancas', que no teníamos alternativas. Pero ahora somos realidades. La propia Esperanza Aguirre ya ha dicho que Ciudadanos no cuenta solamente en las encuestas, sino como una alternativa.

¿Le gustó a usted el trasvase de militantes y simpatizantes de UPyD?

Yo fui de las personas que dije y defendí que lo que no me gustaba de UPyD era su cúpula. Pero evidentemente hay mucha gente válida, que ha demostrado mucha capacidad y que tiene ganas de hacer cosas porque tiene mucha vocación política. Nunca nos ha importado de donde viene la gente. Pero normalmente, las cúpulas de los partidos son las que no entienden a sus bases, y no las escuchan…

¿Será Albert Rivera el candidato a las generales?

Te juro que no lo sé. Si lo supiera, yo suelo ser muy transparente…Pero no lo sé.

¿Debe ser el candidato?

Si lo creo. Por supuesto. Estoy convencido.

Mostrar comentarios