Jerusalén, 7 jul.- El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, regresará a Oriente Medio hacia finales de la semana que viene para proseguir los esfuerzos destinados a reactivar las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos, informa hoy el diario Yediot Aharonot.
Kerry, que desde que asumió su cargo a principios de febrero ha visitado la zona en otras cinco ocasiones, trata de consolidar entre el presidente palestino, Mahmud Abás, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, una propuesta que se retrasa del plazo original previsto por él.
En un principio, la Secretaría de Estado estadounidense se había planteado el anuncio de la vuelta al diálogo para mediados de junio pero en su última visita a la zona, hace sólo una semana, los contactos no avanzaron lo suficiente.
El diario árabe Al Hayyat, editado en Londres, difundió ayer de fuentes occidentales algunos de los principales puntos incluidos en la propuesta estadounidense, entre ellos el de una congelación de seis meses en la construcción en los asentamientos judíos.
La moratoria, similar a la que Israel observó en 2010, afectaría únicamente a las colonias fuera de los grandes bloques de Ariel, Maale Adumim y Gush Etzión, que en un futuro acuerdo de paz el gobierno israelí aspira a anexionarse.
También aceptaría Israel, siempre según ese diario, que las negociaciones se lleven a cabo sobre la fórmula de las fronteras de 1967 con retoques acordados.
A su vez, los palestinos se comprometerían a no acudir a ningún organismo internacional con el objeto de obtener reconocimiento o condenar a Israel.
Uno de los asuntos que retrasa la reactivación del diálogo es la demanda palestina de liberar a un centenar de presos que cumplen condena desde antes de los acuerdos de Oslo en 1993, a la que Israel se niega con el argumento de que si el proceso fracasa habrá liberado innecesariamente a terroristas con las manos manchadas de sangre.
La solución intermedia que el jefe de la diplomacia estadounidense tratará de cerrar en su próxima visita es que la liberación de los presos se realice de forma gradual, mientras avanzan las negociaciones políticas.
La última vez que israelíes y palestinos se sentaron a negociar fue en septiembre de 2010, en el marco de otra moratoria parcial en las colonias, aunque lo hicieron sólo durante tres semanas.
El lanzamiento del plan Kerry también contemplará una serie de proyectos económicos por valor de 4.000 millones de dólares para fomentar el desarrollo en Cisjordania, sumida en una grave crisis desde hace dos años.
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