San Sebastián, 16 ene.- La familia del guardia civil Antonio Ramos Ramírez, asesinado por ETA en 1989 y por cuyo crimen estaba imputado el terrorista Iosu Uribetxeberria Bolinaga, ha dicho hoy que "no se alegra" de su muerte esta madrugada porque "lo único que ansiaba" era que "todos" los supuestos implicados fueran juzgados.
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco, Covite, ha informado hoy de que los familiares del agente de la Guardia Civil asesinado han pedido a esta asociación que difunda un comunicado.
Según el escrito, la familia de esta víctima dice textualmente que "no se alegra de la muerte del etarra Bolinaga porque lo único que ansiaba es que todos y cada uno de los miembros del 'comando Belotxa' -Javier Ugarte Villar, José Luis Erostegi y el propio Iosu Uribetxebarria Bolinaga- fuesen juzgados por el atentado que acabó con la vida" de su ser querido, el 8 de junio de 1986.
La muerte esta madrugada en Arrasate del etarra Uribetxebarria Bolinaga como consecuencia de un cáncer terminal por el fue excarcelado hace dos años, impedirá -lamenta la familia de la víctima- que sea juzgado, aunque señala que "sí habrá juicio" contra los otros dos presuntos asesinos.
Los allegados del guardia civil Antonio Ramos subrayan en sus "demandas", al igual que las del Covite, que "siempre han estado enmarcadas en el derecho a la verdad y a la justicia, no en la venganza".
"Acusar a las víctimas que buscan justicia de buscar venganza forma parte de una estrategia llevada a cabo por agentes políticos y sociales que pretenden asentar la impunidad", concluyen.
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