La Fiscalía norirlandesa pide una investigación sobre clínica abortista

  • La Fiscalía de Irlanda del Norte pidió hoy al Parlamento autónomo regional que investigue las actividades de la primera clínica privada que desde hoy ofrece abortos en la isla de Irlanda.

Dublín, 18 oct.- La Fiscalía de Irlanda del Norte pidió hoy al Parlamento autónomo regional que investigue las actividades de la primera clínica privada que desde hoy ofrece abortos en la isla de Irlanda.

La solicitud del fiscal general, John Larkin, coincide con la apertura oficial hoy de la clínica en Belfast, gestionada por el centro Marie Stopes, una organización sin ánimo de lucro que ofrece atención en áreas de salud sexual y reproductiva en 42 países.

Según un portavoz oficial, la Fiscalía quiere asegurarse de que la clínica opera de acuerdo con la legislación vigente, que solo permite abortos a mujeres mayores de 16 años que no superen las nueve semanas de gestación y cuya vida corra peligro o cuando el embarazo pueda provocar problemas físicos o mentales para la madre.

En una carta enviada al comité de Justicia del Parlamento norirlandés, el fiscal solicita a las autoridades que investiguen las actividades de este centro para determinar si opera de acuerdo con la legislación vigente.

Mientras, unas 200 personas permanecen hoy concentradas frente a la clínica, situada en pleno centro de Belfast, para protestar contra su apertura.

El grupo antiabortista Precious Life ha instando a sus miembros a comportarse "con dignidad" durante estos actos de protesta ante el centro, que atenderá también a mujeres originarias de la República de Irlanda, donde el aborto está muy controlado.

Los médicos de este centro en Irlanda del Norte solo podrán practicar abortos a mujeres mayores de 16 años que no superen las nueve semanas de gestación, como establecen las leyes en esta provincia británica.

El Servicio Nacional de Salud norirlandés ofrece terminaciones del embarazo en situaciones muy específicas, lo que, en la práctica, significa que muy pocos casos cumplen los criterios para practicar un aborto.

En la clínica Marie Stopes de Belfast se determinará a través de una ecografía la existencia de un embarazo, su periodo de gestación y cualquier complicación que pueda existir antes de llevar a cabo un aborto, que no se practicará a través de un procedimiento quirúrgico, sino con la ingesta de una píldora.

Este tratamiento costará 450 libras esterlinas (560 euros) y también tendrán acceso a él las mujeres de la República de Irlanda, que, como en Irlanda del Norte, solo pueden abortar cuando su vida corre peligro.

El pasado año, 1.007 mujeres norirlandesas y 4.149 irlandesas viajaron a Inglaterra o Gales para poder terminar sus embarazos.

La Ley del Aborto en Inglaterra, Gales y Escocia data de 1967, mientras que en Irlanda del Norte aún se rige por la Ley de Ofensas contra la Persona de 1861 y la Ley de Justicia Criminal de 1945.

Mostrar comentarios