La Guardia Civil salva a un hombre tras un accidente de tráfico y 40 minutos en el agua

A las 4:30h de la mañana una patrulla de la Guardia Civil de la localidad granadina de Loja, fueron avisados de que en un camino rural había ocurrido un accidente. En ese momento, los agentes no podían hacerse una idea de la complicada ejecución de salvamento en la que se verían implicados en la madrugada del viernes.

Un vecino de Ventorros de San José-Loja, al volante de un vehículo todo terreno, se había salido un camino rural y volcado su coche sobre en cauce de un arroyo. Estaba lloviendo y el caudal del arroyo iba en aumento, por lo que el agua estaba entrando en el coche y su conductor no paraba de gritar pidiendo ayuda.

El hombre de 59 años quedaba atrapado entre el volante y los asientos traseros, sin sufrir impactos graves, pero sumergido boca abajo en el agua.

El cuerpo de bomberos de Loja tuvo que acceder desde la parte trasera del todo terreno y cortar los asientos con una tijera hidráulica hasta llegar al accidentado, ya que las puertas del vehículo quedaron bloqueadas.

Mientras tanto los agentes cogieron de los brazos al conductor y mantuvieron su cabeza fuera del agua hasta que los Bomberos llegaron unos cuarenta minutos después, "minutos que se hicieron muy largos porque cada vez había más agua y porque la noche era fría y el agua estaba helada".

Una maniobra que duró más de 40 minutos, y que resultaba totalmente angustiosa para quienes asistían a dispositivo de salvamento.

Finalmente el hombre fue sacado del vehículo y llevado a un centro hospitalario donde ingresó con un cuadro de hipotermia. La Guardia Civil indica que no se teme por su vida, y que en pocas horas podrá volver a casa.

En cuanto al lugar de los hechos, las mismas fuentes apuntan que el tramo es bastante conflictivo, ya que se trata de una vía estrecha y mal asfaltada que se encuentra entre dos arroyos. Todo parece apuntar que el hombre arrimó demasiado su todo terreno a uno de los filos hasta que cayó al cauce y volcó.