La investigación por la muerte de los holandeses entra en una nueva fase

  • La investigación en torno a la desaparición y muerte de la de la exjugadora holandesa de voleibol Ingrid Visser y su novio, Lodewijk Severein, ha entrado en una nueva fase, centrada ahora en analizar las pruebas recabadas y atar cabos entre las distintas declaraciones de los implicados.

Murcia, 30 may.- La investigación en torno a la desaparición y muerte de la de la exjugadora holandesa de voleibol Ingrid Visser y su novio, Lodewijk Severein, ha entrado en una nueva fase, centrada ahora en analizar las pruebas recabadas y atar cabos entre las distintas declaraciones de los implicados.

Tras casi tres semanas desde que se produjese la desaparición en Murcia de Visser, de 36 años, y Severein, de 57, la policía no prevé detenciones inminentes que sumar a la de el exgerente del Club Atlético Voleibol (CAV) Murcia 2005 Juan Cuenca, en prisión provisional desde el pasado martes, y a las de los dos ciudadanos rumanos encarcelados desde anoche como presuntos autores materiales de los crímenes.

Está previsto que los tres detenidos lleguen la próxima semana a Murcia tras inhibirse a favor del juzgado de instrucción número 7 de esta ciudad, que abrió las diligencias por las muertes tras el hallazgo de los cadáveres, el número 16 de Valencia, cuya titular tomó declaración a los tres arrestados.

Esto implica también el traslado de las diligencias policiales y el análisis judicial de las testimonios tomados hasta ahora.

En esas diligencias aparece también la transcripción de las cuatro horas y media de testimonio que prestó ante la Policía Nacional el presidente del ya desaparecido CAV Murcia 2005, Evedasto Lifante, interrogado el 22 de mayo, día en el que apareció aparcado en la avenida Juan Carlos I, de Murcia, el coche de alquiler en el que los fallecidos llegaron el día 13 desde el aeropuerto de Alicante.

Lifante, que niega cualquier implicación en los hechos y ve a Juan Cuenca "capaz de hacer algo así (el doble crimen) si se ve muy pillado", cree que con la detención de su excolaborador y la de los dos presuntos autores materiales de los asesinatos "el caso está cerrado".

Correos electrónicos, conversaciones telefónicas o vídeos procedentes de las cámaras de seguridad próximas al hotel donde la pareja se alojó y al lugar donde aparcaron el turismo alquilado para asistir a una cita en una clínica de fertilidad, centran ahora la atención de la policía para intentar desentrañar este caso, cuyo móvil principal son desavenencias en los negocios.

A ello se suma la información recopilada en las viviendas de los detenidos, la procedente de las declaraciones de los implicados y allegados a los fallecidos y la que ofrezcan el análisis forense de los restos mortales de estos, hallados el 27 de mayo semienterrados en un huerto, junto a una vivienda de la pedanía murciana de Alquerías.

Los restos están siendo analizados en los laboratorios de la policía científica en Madrid para certificar que son los de la exjugadora y su pareja, y, previsiblemente, entre hoy y mañana se tendrá la certificación oficial de su identidad, ya que el informe forense está muy avanzado, según adelantó ayer el delegado del Gobierno en Murcia, Joaquín Bascuñana.

El mundo del voleibol está conmocionado por este doble crimen, sobre el que fuentes próximas a la investigación afirmaron que había sido cometido con "una violencia importante", y ni compañeras de Visser ni sus antiguos entrenadores se explican cómo algo así ha podido ocurrirle a una deportista tan querida en su país.

Entre los que fueron entrenadores de la jugadora holandesa se encuentra Pascual Saurín, que coincidió con ella en la temporada 2009-2010 y confesó a Efe que abandonó el club precisamente por desavenencias técnicas con Juan Cuenca.

La familia ha mostrado desde el inicio de la investigación su malestar por la publicación de ciertas informaciones relativas a cómo se produjo la muerte de la pareja, que han calificado de "innecesarias".

En declaraciones a Efe, Miriam Van de Velde, la portavoz de la familia de Visser y Severein, se ha mostrado muy contrariada por la publicación, por ejemplo, del supuesto embarazo de la deportista en el momento de su muerte, sobre todo "porque la familia no lo sabía" y porque, hasta el momento, no ha recibido información oficial sobre esa circunstancia.

Las investigaciones en torno a este caso, que se encuentra bajo secreto de sumario, continúan y no se descartan más detenciones.

Mostrar comentarios