El entrenador brasileño había sido acusado un mes antes del inicio del Mundial de Brasil-2014, en el que dirigió a la selección anfitriona.
Los hechos se remontan al periodo entre 2003 y 2007, cuando 'Felipao' dirigió a la selección portuguesa y no declaró los ingresos obtenidos por sus derechos de imagen.
El montante de esta partida alcanzaba los 7,4 millones de euros, según la prensa portuguesa.
Campeón del mundo como entrenador de Brasil en 2002, regresó a la 'Seleçao' en noviembre de 2012 y salió del equipo tras la histórica derrota 7-1 en semifinales del Mundial 2014 frente a Alemania.
Actualmente dirige al Guangzhou Evergrande, campeón chino, con el que firmó en junio un contrato por dos años y medio.
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