Pasear o conducir por algunas calles es, en ocasiones, misión imposible. Pero ahora se puede complicar un poco más. Aunque lo primero que pensarán los vecinos es que algún gamberro ha querido hacer la gracia, se trata de un tema serio.
El robo de tapas de alcantarillas supone un peligro para toda persona o vehículo que circule por la calle. Un detalle a tener en cuenta es el tipo de zona dónde sucede. Los delincuentes prefieren actuar en zonas residenciales, en las que el tránsito de vecinos es menor.
Si el alcalde quieres estar tranquilo, lo mejor es que selle las tapas con puntos de soldadura.
El cobre está vigilado
Este tipo de robos se ha empezado a multiplicar tras el incremento que se ha producido en los robos de cobre. Además, cuando se anda con cables de faroles siempre hay riesgo de sufrir una descarga eléctrica. Las tapas metálicas se convierten en algo menos peligros para los ladrones.
Por cada tapa pueden ganar cerca de ocho euros, según explica el diario extremeño hoy.es. Si las tapas son grandes y llevan el marco incluido, se paga al peso a un precio de 84 euros por kilo en las chatarrerías ilegales.
Los robos de tapas de alcantarilla se están empezando a dar en Cáceres (Extremadura), pero en otras partes de España ya se han dado varios casos. En Valencia detuvieron a dos personas por sustraer más de 100 tapas, mientras que en Oviedo otros dos ladrones fueron detenidos por robar 80.
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