Bruselas.- La Alta Representante de la Unión Europea, Catherine Ashton, condenó la demolición ayer de una parte del histórico hotel Shepherd para habilitar el terreno con vistas a la creación de un nuevo asentamiento judío en la parte este de Jerusalén.
"Reitero que los asentamientos son ilegales bajo la legislación internacional, socavan la confianza entre las partes y constituyen un obstáculo para la paz", indicó hoy la jefa de la diplomacia comunitaria en un comunicado.
Ashton recordó que el este de Jerusalén es parte de los territorios palestinos ocupados y que la Unión Europea "no reconoce su anexión por parte de Israel".
El derribo del hotel Shepherd -situado en el barrio de Sheij Jarrah, en territorio ocupado por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967- ha sido objeto de duras críticas internacionales.
El recinto es propiedad del empresario judío estadounidense Irving Moskowitz, que el año pasado obtuvo el permiso del Comité de Planificación Urbana de Jerusalén para levantar un asentamiento judío.
La Alta Representante expresó también su preocupación por el "reciente recrudecimiento de la violencia en los territorios ocupados" y lamentó la pérdida de vidas registrada.
"Llamamos a todas las partes a mostrar moderación y a detener toda violencia", señaló. EFE
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