Libia. Human rights denuncia ejecuciones sumarias de detenidos por parte de los gadafistas


Miembros de la Brigada Jamis, una poderosa fuerza militar que encabeza Jamis Gadafi, hijo del líder libio Muamar el Gadafi, han podido ejecutar sumariamente a detenidos en un almacén cercano a Trípoli, capital de libia, el pasado 23 de agosto, y en un plazo de tres días esa instalación se incendió por causas que se desconocen.
Así lo afirmó este lunes Human Rights Watch (HRW), que inspeccionó el pasado sábado los restos carbonizados de 45 detenidos en un almacén en el barrio de Jalida Ferjan, al sur de Trípoli, junto a la base militar de Yarmuk.
Además, otros dos cadáveres estaban sin quemar fuera del almacén. HRW aseguró que en el edificio estaba la pintada "Brigada 32", que corresponde a la dirigida por Jamis Gadafi.
"Lamentablemente, éste no es el primer informe espantoso de lo que parece ser la ejecución sumaria de detenidos en los últimos días de control del régimen de Gadafi sobre Trípoli", señaló Sarah Leah Whitson, directora de HRW para Oriente Medio y Norte de África.
Whitson indicó que "estos asesinatos despiadados se llevaron en medio del ramadán y los responsables deben ser llevados ante la justicia y ser castigados".
Otra organización de derechos humanos, Amnistía Internacional, ya aseguró el pasado viernes haber encontrado pruebas de que los gadafistas habían matado a numerosos detenidos en dos campamentos militares de Trípoli los pasados 23 y 24 de agosto.
HRW entrevistó a un superviviente, Abdulrahim Ibrahim Bashir, de 25 años, quien dijo que los guardias del almacén, utilizado como prisión, leyó los nombres de 153 detenidos el día de las ejecuciones (125 de ellos, civiles) y que unos 20 de ellos lograron escapar.
Human Rights recalcó que, según el derecho internacional humanitario, aplicable durante un conflicto armado, la violencia contra la vida y, en particular, el asesinato de todo tipo de civiles y personas fuera de combate, como los detenidos, está estrictamente prohibida y constituye un crimen de guerra, y que el asesinato puede constituir un crimen contra la humanidad cuando se cometa como parte de un ataque sistemático o generalizado contra una población civil.

Mostrar comentarios