Líder sindical salpica a un exministro en juicio por sobornos en Argentina

  • El líder sindical Hugo Moyano declaró hoy ante el tribunal que juzga al expresidente argentino Fernando de la Rúa y otros siete imputados por el presunto pago de sobornos en el Senado el año 2000 que el entonces ministro de Trabajo, Alberto Flamarique, habló de la posibilidad de pagar a legisladores.

Buenos Aires, 6 nov.- El líder sindical Hugo Moyano declaró hoy ante el tribunal que juzga al expresidente argentino Fernando de la Rúa y otros siete imputados por el presunto pago de sobornos en el Senado el año 2000 que el entonces ministro de Trabajo, Alberto Flamarique, habló de la posibilidad de pagar a legisladores.

Según Moyano, en una cena con sindicalistas Flamarique dijo que "para los senadores tenía la Banelco" (tarjeta de débito) con vistas a sacar adelante una polémica reforma laboral impulsada por el oficialismo y que era rechazada por los sindicatos.

Ante el tribunal oral, el líder de la Confederación General del Trabajo dijo, sin embargo, no tener "constancia de que hayan pagado coimas" a senadores del Partido Justicialista (PJ, peronista), por entonces principal fuerza de oposición al Gobierno del radical De la Rúa (1999-2001).

De todos modos, señaló que, antes de la votación en el Senado, los sindicatos contaban con que los senadores peronistas "no iban a votar a favor" de la reforma, como finalmente lo hicieron.

Según relató Moyano, en la cena con Flamarique y otros dirigentes sindicales discutió con el entonces ministro de Trabajo, uno de los imputados en este juicio, sobre el proyecto de reforma laboral.

"Al final le dijimos que podía ser que fuera aprobada en Diputados, porque allí la Alianza (colisión gobernante) tenía mayoría, pero no iba a pasar en el Senado, porque allí era el justicialismo el que tenía la mayoría", relató Moyano.

Fue entonces cuando, según la declaración del líder sindical, Flamarique lanzó la frase: "¡Para los senadores tengo la Banelco¡".

Si es encontrado culpable, De la Rúa, que renunció a su cargo en diciembre de 2001 en medio de un estallido social y una severa crisis económica, puede recibir una pena de hasta seis años de prisión, al igual que los otros acusados.

El juicio, que se inició el pasado 14 de agosto, es el segundo contra un exmandatario constitucional argentino desde la última dictadura tras el proceso que se siguió a Carlos Menem (1989-1999) por el presunto contrabando de armas a Croacia y Ecuador, en el que fue absuelto.

Junto a De la Rúa están sentados en el banquillo de los acusados los exsenadores peronistas Alberto Tell, Augusto Alasino, Remo Constanzo y Ricardo Branda.

También son sometidos a juicio quien fuera director de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE, servicio secreto) Fernando de Santibáñez, el propio Flamarique y el exsecretario parlamentario Mario Pontaquarto, quien confesó haber llevado él mismo el dinero para los sobornos.

Se prevé que el juicio oral se prolongue de seis a ocho meses y que atestigüen ante el tribunal unas 340 personas.

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