López se atribuye haber puesto fin a los “privilegios y redes clientelares" de los gobiernos del pnv


El lehendakari, Patxi López, se atribuyó este miércoles el mérito de haber acabado en tan sólo dos años con los “privilegios”, las “desigualdades” entre ciudadanos, los “espacios de impunidad”, los “chiringuitos” y las “redes clientelares” generados por los anteriores gobiernos del PNV.
En su intervención en el “Foro ABC”, en Madrid, López destacó de la gestión desarrollada desde que es el jefe del Gobierno vasco el regreso de la “normalidad” a la vida política y social y el dejar atrás “todo aquello que nos enfrentaba”, como el “plan Ibarretxe” o iniciativas similares.
“Y ese cambio fundamental se ha producido en un tiempo récord y de una manera tan intensa (y tan natural al mismo tiempo), que ha sido asumido de manera inmediata por una sociedad que estaba deseando dejar atrás un tiempo que no compartía”, subrayó el lehendakari.
López significó, porque “esto a veces se nos olvida”, que “hace sólo dos años, anteayer como quien dice, el Gobierno vasco se dedicaba, casi en exclusiva, a proponer planes y consultas, que lo único que conseguían era dividirnos y enfrentarnos a los vascos”.
“Todo era bronca y conflicto. Enfrentamientos con todos y para todo” y, en la actualidad, señaló, “hemos conseguido acabar con todo eso”. “Euskadi ha dejado de ser el foco permanente de la noticia convulsa, del conflicto constante y ha pasado a ser escenario de diálogos y acuerdos en positivo”, destacó.
Sin embargo, advirtió que “no nos podemos dormir”, porque “el PNV y otros partidos nacionalistas siguen insistiendo en que el futuro del País Vasco pasa por el derecho a decidir, por el soberanismo, por la consulta… y, entre otras cosas, para eso piden ahora una Mesa de Partidos. Para volver a poner encima de la mesa sus planes soberanistas, con eso que llaman normalización”.
López aseguró que con su gobierno el País Vasco está recuperando su “verdaderas señas de identidad”, “de la Euskadi más auténtica. La Euskadi de siempre”.
“Y a veces, nos vienen con el cuento de que estamos diluyendo la identidad de vasca”, denunció, para apostillar: “No. Lo que estamos diluyendo son los privilegios, las desigualdades entre unos ciudadanos y otros, los espacios de impunidad, los chiringuitos y las redes clientelares que otros construyeron, las políticas que marginan en su propio país a la mitad de la sociedad vasca”.
MENOS ETA
Por otra parte, reiteró su mensaje de tolerancia cero contra el terrorismo, y evaluó con satisfacción que esta política está permitiendo vislumbrar el final de ETA.
“Cuando llegamos al Gobierno, las calles tenían, permanentemente, espacios tomados por los violentos. Nuestras fiestas tenían espacios que servían de trampolín para la propaganda del terrorismo. Y, un día sí y otro también, los muros de la vergüenza nos avisaban, con ostentación, de la presencia del terror y, especialmente, humillaban a las víctimas y a la propia dignidad de la sociedad vasca”. Hoy eso ya no ocurre, aseveró.
Recordó que su Gobierno empezó siendo amenazado por ETA, antes incluso de haberse formado, pero insistió en que gracias a una “política de firmeza democrática y de tolerancia cero” hacia la violencia se está liderando el declive del terrorismo y la recuperación de la libertad y la paz ciudadana.
“Es decir”, comentó, “mientras que los nacionalistas dicen que no lideramos el final de ETA, somos los que hemos liderado las políticas que nos han traído hasta esta situación, en la que ETA está más débil que nunca y sabe que su único destino es desaparecer; y la izquierda abertzale sabe que su único camino, si quiere existir y hacer política, es el de integrarse en democracia”.

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