Lorenzo Silva: España podría ser una historia de éxito, pero suma descalabros

Santander, 25 jun.- El escritor Lorenzo Silva piensa que España tiene factores suficientes para ser una "historia de éxito", pero ha lamentado que no termina de serlo y protagoniza una y otra vez "reveses, descalabros y decepciones".

"Vivimos en un país que, por alguna extraña razón, pudiendo ser una historia de éxito, nunca termina de serlo", ha comentado el ganador del último Premio Planeta en una rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

En su opinión, la última oportunidad desaprovechada es "ofensiva", porque España tenía de todo, contaba con "el viento a favor", y se ha "dilapidado buena parte del capital en cosas inútiles y pagando a personas que no han hecho nada" por la sociedad, salvo empobrecerla.

Esto, a su juicio, lleva al "desánimo y la desmoralización", pero no quiere caer en ellos.

Y es que, aunque la sociedad española está ahora "maltrecha, depauperada, confusa y abatida", no cree que el país sea una "calamidad absoluta" y, por eso, apela a la responsabilidad de cada uno para afrontar la situación.

Según dice, en España "se han hecho disparates, estupideces y cosas intolerables por personas intolerables". Pero también piensa que hay "mucha gente decente, digna, inteligente, que trabaja", que ha impedido que el país se vaya "al garete completamente".

Por eso, ha reivindicado a los "héroes cívicos", guardias civiles, policías, trabajadores de la justicia y de la administración en general, empleados de la sanidad o de la educación, que se esmeran por dar lo mejor de sí mismos, muchas veces, sin medios, bajo las órdenes de "pésimos jefes", con políticas "pésimas" o trabajando para un sistema que no funciona.

El autor de "La marca del meridiano" confía en esos ciudadanos para que España logre ser una historia de éxito, aunque no ve "visos" de que vaya a ser así "de momento", porque los recortes siguen afectando a la educación o la investigación, y crece en cambio el presupuesto de la "liga de las estrellas" a través de "impuestos que no se pagan" y subvenciones municipales.

Tampoco vislumbra en el horizonte una solución a la violación de los derechos de propiedad intelectual, porque no observa decisión política y los ciudadanos no lo valoran.

Desde su punto de vista, los de propiedad intelectual son solo derechos "ficticios", porque están en la legislación pero "se violan todos los días".

"Mis derechos están defendidos, no por la ley española, sino por la buena voluntad de unos cuantos miles de lectores", ha afirmado.

Reconoce que por ahora él se está "salvando de la quema" aunque, según dice, eso es solo una "tranquilidad personal" y se le cae "el alma a los pies" cuando escucha a alguien tocando bien en la calle pidiendo limosna, mientras otras personas "cobran lo que cobran por hacer lo que hacen en la televisión".

"Cada país tiene lo que se acaba buscando y lo que quiere", ha comentado el autor, quien ha opinado que la piratería en España empieza a ser una "infección".

Si las cosas siguen así, cree que se producirá una "barrida espectacular" en la clase media literaria en España y, de hecho, conoce ya algunos casos de escritores que han decidido retomar sus trabajos anteriores.

Piensa que en algún momento habrá que tomárselo en serio y precisa que no se trata de "perseguir a todo el mundo" sino de actuar frente a las grandes corporaciones que se están beneficiando, sin dejar impuestos en España y provocando un "desangramiento" de sectores económicos de verdad y empleos reales en el país.