Madrid. La comunidad finaliza con rivas las reuniones bilaterales con los ayuntamientos afectados por cañada real


El consejero de Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, se reunió hoy con el alcalde de Rivas Vaciamadrid, José Masa, quien le entregó el censo que confirma que 1.038 madrileños viven en la Cañada Real en 274 unidades de convivencia a su paso por el municipio.
Tanto Victoria como Masa, aseguraron que el encuentro de hoy fue un “paso en la buena dirección”. Además, el consejero añadió que todo este proceso de negociación supone un “paso valiente” por parte de las administraciones, que se han “alineado” para encontrar la mejor solución para los ciudadanos que viven en Cañada Real y los que rodean sus tramos. Esta, aseguró, es la primera vez que las administraciones se ponen de acuerdo para afrontar este problema que existe desde hace más de 50 años en la región.
Victoria agradeció al alcalde su “mejor” predisposición al diálogo y a la búsqueda de un acuerdo que dé una solución al problema de la cañada. Aseguró que, una vez se reúna con la delegación del Gobierno, tendrá lugar, espera que “lo antes posible”, la mesa con todas las administraciones implicadas. Además, añadió que su deseo es, que a través de reuniones paralelas con administraciones y vecinos se sienten las bases de una futura solución que permita poder poner en marcha un acuerdo marco de contenido social.
José Masa ratificó que la Ley 2/2011 de la Cañada Real siempre les pareció que podía tener la solución al problema de la cañada y que espera que la reunión con todas las administraciones, cuya convocatoria ha de ser un motivo para “alegrarse”, dé lugar a los principios de consenso y responsabilidad institucional.
El alcalde afirmó que la idea de Rivas sigue siendo convertir el tramo afectado por Cañada Real en zona verde y añadió que debería de existir una política de realojos. Pese a esto, añadió, ésta es “la filosofía de partida” y no quiere adelantar que sea “la de llegada”. Aseguró que no reducen “ni un grado” lo que ha sido su posicionamiento, pero, sin embargo, abren sus expectativas a la solución general sin poner el resultado final como el “objetivo único”, sino el “camino como fórmula” para acercarse a la solución del problema.
Los principales problemas en la Cañada Real, aseguró Masa, son tres. El primero y, a su juicio, fundamental es el de la exclusión social, ya que viven personas en “condiciones de falta de recursos y precariedad”, explicó. El segundo, afirmó, es el de inseguridad, pues la cañada comporta una parte, especialmente en Valdemingómez, resaltó, donde se asienta el mercado de la droga, y el tercero y último, añadió, es el de ilegalidad, pues existe una serie de ciudadanos que viven en casas que ocupan lo que hasta hace poco tiempo era un suelo de dominio público y hoy es un bien patrimonial.
El consejero, por su parte, reiteró que “todos”, tanto administraciones como los vecinos, tienen algo que aportar en este proceso de negociación, por lo que resaltó que “no habrá nadie que no sea escuchado”, al menos, por la consejería. Ante esto, el alcalde explicó que tampoco para el Ayuntamiento de Rivas es excluyente hablar con los vecinos, pero que primero han der ser las administraciones las que encuentren el consenso y dejen “claros los planos” y, luego, se escuche “a todo aquel que hay que escuchar”.
Finalmente, Victoria aseguró que es importante llegar a las bases de acuerdo "lo antes posible", tanto para las administraciones como para los vecinos y para las ciudades afectadas, por lo que asegura que la predisposición que todos están demostrando en el diálogo refleja que ninguno quiere llegar al 13 de marzo de 2013, fecha que recoge la Ley 2/2011, sin haber firmado un acuerdo. Tanto el consejero como Masa, aseguraron que les encantaría tener el soporte y las bases del mismo este año y después comenzar con el plan de ejecución. "Sería muy positivo para todos", resaltó Victoria.

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