Matas considera infundios las acusaciones del fiscal sobre la ópera de Palma

Palma.- El expresident balear Jaume Matas ha calificado de "infundios" y falsedades las acusaciones formuladas contra él por el fiscal en la investigación del proyecto de la ópera de Palma que diseñó el arquitecto Santiago Calatrava, en la que le pide que preste una fianza civil de 1,6 millones de euros.

En su escrito oponiéndose a la petición fiscal, y en el que reclamaba su declaración en este asunto, que ha aceptado el juez del "caso Palma Arena" para el día 22, Matas defiende que el proyecto no era una quimera para obtener rédito electoral, sino una idea "totalmente realizable", de impulso político y de interés público.

Matas asume toda la responsabilidad política del proyecto y exculpa, en este sentido, a su exconseller de Cultura Francesc Fiol, imputado en este asunto, ya que en su Govern los conselleres se encargaban directamente de los asuntos relacionados con sus áreas.

La defensa de Matas señala que "constituyen verdaderos infundios" las afirmaciones del fiscal y la acusación (en nombre de la comunidad de Baleares) de que el proyecto de la ópera fuera "irrealizable", adoleciera de "practica imposibilidad material y económica" y presentara una "ausencia total de interés público".

"No es admisible que se tache de quimera una actuación urbanística que en Palma ha estado sobre el tapete en reiteradas ocasiones", sostiene el escrito, para liberar el Muelle Viejo de los usos portuarios y convertirla en una zona de ocio y servicios.

Considera que es "altamente ofensivo" para el prestigio de Calatrava la insinuación de que hizo un trabajo "de paripé" porque el proyecto era irrealizable, sino que, por el contrario, se podía llevar a cabo con el concurso de las diversas administraciones que pudieran verse implicadas.

Rechaza que el proyecto no se pudiera hacer porque no había un estudio económico de su coste y argumenta que las obras públicas importantes que "transforman los pueblos, las ciudades o las regiones arrancan de una idea seductora" como, cita como ejemplo, la Barcelona de los Juegos Olímpicos de 1992.

En cuanto a que la ópera no tuviera ningún interés público, replica que pocas actuaciones urbanísticas pueden concebirse en Palma que revistan mayor interés que la remodelación de 150.000 metros cuadrados de suelo urbano, hoy portuarios, que forman un "triángulo único en el mundo" con la Catedral y el Castillo de Bellver.

Sobre las supuestas irregularidades en la contratación de Calatrava sin la convocatoria de un concurso, la defensa de Matas explica que cuando se contrata a un artista de renombre no suele mediar este tipo de procedimientos.

"¿Es que alguien piensa que si interesase la contratación de Rafael Nadal habría que montar un concurso mediante el que se posibilitara la concurrencia y licitación de otros deportistas?", se pregunta.

Y como ejemplo de lo dicho expone que la contratación de Miquel Barceló para la Catedral de Mallorca fue "una simple asignación digital, admitida y consentida por todos, dada la merecida aureola del singular artista".

Jaume Matas sostiene que si en la contratación del arquitecto valenciano hay "irregularidades administrativas", por sí mismas "carecen de toda trascendencia penal".

También rechaza que constituya "indicio de delito" que el político incluyera en su programa electoral de 2007 el compromiso de llevar a cabo dicha obra de "interés general", aunque "la divulgación de programas o proyectos interesantes puedan determinar un rédito electoral".

De ahí que considere "rotundamente falso" y rechace la afirmación del fiscal y acusación de que la única y exclusiva finalidad del proyecto era favorecer sus intereses como candidato.

Por estos motivos, Matas se opone a la fianza por responsabilidad civil pedida para él y pide al juez el sobreseimiento y archivo del asunto.