Mohamed VI acepta dimisiones de ministros de Istiqlal anunciadas hace 2 meses

Rabat, 22 jul.- El rey Mohamed VI de Marruecos aceptó hoy las dimisiones de los cinco ministros del partido nacionalista Istiqlal anunciadas hace ya dos meses, pero les pidió, como entonces hizo, que sigan en sus puestos hasta el nombramiento de sus sucesores.

Un escueto comunicado difundido hoy por el Gabinete Real señala que el rey recibió al presidente del Gobierno, Abdelilah Benkirán, quien le entregó las dimisiones de cinco ministros -entre ellos Abdesalam Baraka, titular de Economía, una de las carteras más importantes-, aceptadas por el monarca.

Pero acto seguido el rey pidió a los dimisionarios -cinco de los treinta ministros del gobierno- que gestionen los asuntos corrientes para permitir así al jefe de gobierno iniciar las consultas para formar una nueva mayoría.

Precisamente hoy el presidente Benkirán, del islamista Partido Justicia y Desarrollo (PJD) inició una ronda de consultas con los partidos en la oposición para sustituir al Istiqlal en la coalición de gobierno y lograr así una mayoría suficiente en un parlamento de 395 escaños.

La opción que se antoja más factible es sumar a la Reunión Nacional de Independientes (RNI), de tendencia liberal a la coalición que forman el PJD con el Movimiento Popular (berberista) y el Partido Progreso y Socialismo (excomunista), y de hecho ha sido con el RNI con el que Benkirán inició sus consultas.

Según comentarios de numerosos observadores, la "jugada" de dimisión colectiva presentada el 12 de mayo pasado por el nuevo secretario general del Istiqlal, Hamid Chabat, ha desgastado al partido más que al gobierno y, paradójicamente, ha acabado fortaleciendo al PJD, que salvo raras ocasiones no ha contestado a los ataques proferidos casi a diario desde las filas nacionalistas.

Chabat no ha conseguido involucrar al rey en la crisis -pues éste se ha limitado a aceptar las dimisiones-, no ha podido impedir que esa crisis se prolongue y pierda así efecto político, y por último no ha conseguido arrastrar en la dimisión a uno de los seis ministros del partido, el de Educación, Mohamed el Wafa, que ha preferido conservar la cartera y ser suspendido del partido.