Abuya, 26 nov.- Al menos dos agentes murieron hoy en un ataque perpetrado por dos hombres armados a una oficina del Escuadrón Antirrobo de la Policía de Nigeria (SARS, por sus siglas en inglés) en Abuya, confirmaron fuentes oficiales.
Según dijo a la prensa el portavoz de la Policía Frank Mba, durante el ataque consiguieron escapar 30 presos que se encontraban en las dependencia, aunque precisó que 25 de ellos ya han sido arrestados de nuevo.
Mba aseguró que la respuesta de los policías al ataque desembocó en un prolongado fuego cruzado, que llevó a la detención de dos de los asaltantes.
La Policía nigeriana sospecha que los atacantes eran miembros del grupo fundamentalista islámico Boko Haram que habrían tratado de liberar a algunos de sus compañeros, puesto que es una de las dependencias en que las fuerzas del orden de Nigeria retienen a los rebeldes que arrestan.
El ataque sucedió menos de 24 horas después de que un doble atentado suicida en una iglesia situada dentro de un complejo militar en la localidad meridional nigeriana de Jaji causara al menos 11 muertos y 30 heridos.
Por el momento ningún grupo se ha atribuido los atentados, aunque, según los objetivos, coinciden con los seleccionados habitualmente por los radicales islámicos de Boko Haram.
El ataque llega pocos días después de divulgarse que el Ejército de Nigeria ha ofrecido 290 millones de nairas (unos 1,8 millones de dólares) de recompensa por información que conduzca a la captura de 19 dirigentes de Boko Haram, incluido su líder, Abubakar Shekau.
El nombre de este grupo terrorista significa en lenguas locales "la educación no islámica es pecado", y sus miembros luchan presuntamente por imponer la ley islámica en el país, de mayoría musulmana en el norte y preponderancia cristiana en el sur.
Desde 2009, cuando la Policía acabó con el líder de Boko Haram, Mohammed Yusuf, los radicales mantienen una sangrienta campaña que ha causado unos 1.400 muertos, según la organización de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW), aunque el Ejército de Nigeria asegura que son más de 3.000 las víctimas.
Pero HRW, al igual que Amnistía Internacional (AI) y otras organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos, también han denunciado numerosos abusos por parte de las Fuerzas de Seguridad de Nigeria.
Con unos 170 millones de habitantes integrados en más de 200 grupos tribales, Nigeria, el país más poblado de África, sufre múltiples tensiones por sus profundas diferencias políticas, económicas, religiosas y territoriales.
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