Multa de 12.000 euros a un ayuntamiento por hacer mobbing a un trabajador

¿Puede un coordinador deportivo trabajar sin teléfono, sin ordenador y aislado del resto de compañeros? Julián Lozano tuvo que intentarlo.

Después de sufrir acoso laboral durante varios meses, el trabajador del Ayuntamiento de Villarobledo (Albacete) decidió pedir una inspección de trabajo. La conclusión de los inspectores fue que las decisiones organizativas que se habían tomado eran "atentatorias contra la dignidad del trabajador".

Después de dos recursos y meses de papeleo, el Tribunal Supremo le ha dado la razón a Julián Lozano. El ayuntamiento tendrá que indemnizar al trabajador y reponer su puesto de trabajo con las responsabilidades y medios intactos.

Además, la inspección de trabajó aseveró que varios derechos laborales y fundamentales del trabajador habían sido violados, como recoge eldiariodigital.es. Aunque no sirvió para nada, el entonces concejal de deportes se atrevió a recurrir la decisión de Inspección.

Intentos de normalización

La situación llegó a ser tan complicada que Lozano solo pudo comunicarse con sus superiores por carta. En mayo escribió al concejal de deportes, Andrés Jiménez, pidiendo explicaciones a la situación.

Pero la respuesta llegaba mal y tarde. Jiménez fue el primero en insultarle y desde ese momento todo empeoró. Después de ser menospreciado por todo el equipo, Lozano contactó con el alcalde socialista, Pedro Antonio Ruiz. Lo único que dijo el máximo responsable del ayuntamiento es que le extrañaban mucho las denuncias que estaba haciendo.