"La política de Budapest es totalmente inaceptable desde un punto de vista humano (...) Hungría no puede cerrar su frontera, a menos de construir un muro como entre Cisjordania e Israel", dijo Milanovic, tras una visita al centro de acogida de migrantes de Opatovac (noreste).
"Están contemplando cerrar las fronteras. ¿Pero cómo van a detener a la gente? ¿Disparándolos? ¿Desplegando al ejército?", se interrogó el primer ministro.
Asimismo, Milanovic tildó de "provocación" las declaraciones hechas la semana pasada por su homólogo húngaro sobre un próximo cierre de sus fronteras con Croacia.
Hungría cerró el 16 de septiembre su frontera con Serbia, erigiendo una alambrada de púas a lo largo de los 175 km que separan a ambos países. Desde esa fecha, Belgrado dirige a los migrantes que entran a su territorio hacia Croacia, también vecino con Hungría.
"Es una amenaza desagradable. (...) Es una provocación, ¿pero hacia quién? Es algo bajo", dijo Milanovic.
Zagreb estimó el martes que 82.000 migrantes han ingresado a su territorio desde mediados de septiembre. La mayoría ya han salido del país, pasando por Hungría, con destino a Alemania y a los países del norte de Europa.
sva/cn/app/meb/eg
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios