Tras el escrutinio del 90% de los votos, el comunista Serguei Levchenko totalizaba 56,9% de los votos contra 40,9% para Sergueï Erochenko, gobernador interino y representante del partido Rusia Unida de Putin, indicaron las agencia rusas.
El presidente de la Comisión Electoral declaró que el recuento de los votos que faltan no podrá cambiar el resultado del comicio.
En la primera vuelta, celebrada el 13 de septiembre pasado, el candidato de Putin y gobernador interino había obtenido sin embargo 49,6% de los votos.
Confiado en el resultado de la segunda vuelta, Erochenko no hizo prácticamente campaña, a diferencia de su rival, que movilizó a los militantes del Partido Comunista, cuyo secretario general Guennadi Ziuganov viajó a Irkutsk para apoyarlo.
A pesar de ser una personalidad muy conocida, que se presentaba a la gobernación desde hacía veinte años, la victoria de Levchenko sorprendió a los observadores.
El 13 de septiembre pasado, los candidatos del partido de Putin habían ganado ampliamente en las elecciones regionales.
Es la primera vez desde 2012, cuando se restableció la elección de los gobernadores, que era necesaria una segunda vuelta para determinar al vencedor.
El Partido Comunista, que siguió siendo fuerte en los años siguientes a la disolución de la Unión Soviética en 1991, se vio debilitado por la llegada de Putin al poder.
Como los otros partidos presentes en el Parlamento, el Partido Comunista critica raramente al poder y vota prácticamente todos los textos presentados por el gobierno.
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