Pasa a disposición judicial del detenido por el crimen de Playa Blanca

Las Palmas de Gran Canaria.- La mujer hallada muerta a golpes y desfigurada en Fuerteventura no había pedido ayuda en ninguno de los recursos públicos de asistencia a la violencia de género.

No obstante, el Gobierno canario la ha catalogado como una víctima de este fenómeno ya que este "episodio macabro", ocurrido el pasado viernes en un chiringuito abandonado de Playa Blanca, en Puerto del Rosario, "tiene unos indicadores importantes, como el tratamiento que ha recibido esa mujer antes de morir y el ensañamiento que ha habido con ella", que justifican que se catalogue como tal, ha sostenido la directora del Instituto Canario de Igualdad, Isabel de Luis.

La directora del departamento de Igualdad hizo estas declaraciones tras presidir ante dependencias del Gobierno Autónomo de la capital grancanaria un minuto de silencio convocado este mediodía en recuerdo de esa víctima, una mujer colombiana de 53 años identificada como J.A.A.

De Luis precisó, en todo caso, que no hay datos que certifiquen si la mujer era o había sido pareja de su presunto asesino, un indigente asturiano que solía ir con ella a un comedor de Cáritas de Puerto del Rosario y que ha sido detenido acusado de su muerte.

Desde esa perspectiva, indicó que posiblemente la ley estatal sobre violencia de género no contemple este episodio como tal, debido a que esa norma requiere que haya habido una relación de pareja o ex pareja previa, pero insistió en que, pese a ello, en Canarias sí se considera un caso de ese tipo.

Algo que se debe a que Canarias tiene una ley autonómica de 2003 que tiene "un concepto muy amplio de violencia de género, que engloba todo aquel episodio en que una mujer muere por el hecho de ser mujer", argumentó.

Como ejemplo de ello, recordó que en el año 2010 el Estado ha contabilizado 8 casos de violencia de género en Canarias, mientras que las cuentas de las autoridades autonómicas elevan la cifra a 10.

Ya que -detalló- en el cómputo regional se han incluido dos casos que no se contabilizan en el estatal, uno de La Guancha, en Tenerife, donde "el yerno fue a por la hija y mató a la suegra", y otro de Fuerteventura donde un hombre entró a la casa de una joven y la mató, aunque no mediaba entre ellos relación previa.