Peronistas y radicales se enfrentan en último test antes de presidenciales

  • El candidato del peronista Frente para la Victoria que lidera la presidenta argentina, Cristina Fernández, y un radical pelearán este domingo por la gobernación de la sureña provincia de Río Negro en el último test electoral antes de los comicios generales del 23 de octubre.

Buenos Aires, 24 sep.- El candidato del peronista Frente para la Victoria que lidera la presidenta argentina, Cristina Fernández, y un radical pelearán este domingo por la gobernación de la sureña provincia de Río Negro en el último test electoral antes de los comicios generales del 23 de octubre.

El exmaestro César Barbeito, delfín del actual gobernador, Miguel Saiz, busca lograr un nuevo mandato para la Unión Cívica Radical (UCR), la segunda fuerza parlamentaria del país liderada actualmente a nivel nacional por el candidato a presidente Ricardo Alfonsín.

El peronista Carlos Soria juega a su favor con el cansancio de los rionegrinos por la larga permanencia en el poder de los radicales, que llevan casi dos décadas, desde la restauración de la democracia, al frente del gobierno de la provincia patagónica, situada unos 1.590 kilómetros al sur de Buenos Aires.

Las alrededor de 440.000 personas habilitadas para votar, lo que representa el 1,5 por ciento del padrón electoral nacional, además de elegir gobernador deberán renovar el Parlamento provincial y las autoridades municipales en 20 localidades.

Aliados del Gobierno de Cristina Fernández, gran favorita para la reelección el próximo 23 de octubre, se han impuesto en la mayoría de los comicios celebrados en los últimos meses en otras diez provincias argentinas, aunque sufrieron un varapalo en las elecciones a la Alcaldía de Buenos Aires, donde el pasado julio fue reelegido con una holgada ventaja el conservador Mauricio Macri.

No obstante, en las elecciones primarias nacionales celebradas el 14 de agosto, destinadas a convalidar candidatos para los comicios generales de octubre, Fernández obtuvo el 50,24 por ciento de los votos con una ventaja de 38 puntos porcentuales sobre el segundo, lo que deja pocas dudas de cara a su reelección.

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