PP-Málaga niega haber acosado a Díaz y dice que el político debe ser humilde

  • El presidente del PP de Málaga, Elías Bendodo, ha afirmado hoy que el pasado sábado "no hubo ni acoso ni violencia" a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, por parte de los alcaldes populares que reclamaban una deuda, y ha opinado que el político "ante todo tiene que ser humilde y escuchar".

Málaga, 29 oct.- El presidente del PP de Málaga, Elías Bendodo, ha afirmado hoy que el pasado sábado "no hubo ni acoso ni violencia" a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, por parte de los alcaldes populares que reclamaban una deuda, y ha opinado que el político "ante todo tiene que ser humilde y escuchar".

Bendodo, que ha presentado hoy las acciones promocionales del Patronato de Turismo de la Costa del Sol -que también preside- en la feria World Travel Market de Londres, ha aclarado en la rueda de prensa que la intención de los alcaldes y portavoces del PP "no fue incomodar a la presidenta" ni violentar un acto "tan significativo" como el aniversario del Museo Picasso.

A su juicio, fue un acto reivindicativo "como hay cientos" en la provincia de Málaga en el que los alcaldes pretendían "entregar una carta y nada más".

"Actuaciones como ésta, la de acción y omisión, nos alejan del objetivo que tenemos que tener todos los políticos, que es conectar con la ciudadanía", ha subrayado.

Tras expresar su deseo de que situaciones como la del pasado sábado "no se repitan", Bendodo ha señalado que el político "ante todo tiene que ser humilde y escuchar, y eso es lo que yo reclamo a la presidenta de la Junta de Andalucía".

En este sentido, ha anunciado que los alcaldes estudiarán otros canales para exponer sus reivindicaciones, como mociones en pleno o foros para reclamar "algo justo", la deuda de la administración autonómica con los ayuntamientos.

El pasado sábado, un grupo de alcaldes y portavoces del PP de municipios andaluces de menos de 25.000 habitantes abordó en Málaga el coche de la presidenta de la Junta de Andalucía con una pancarta y cartulinas al grito de "la Junta no paga, nos quedamos encerrados".

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