Presidente de Asamblea Constituyente egipcia admite que su misión es difícil

El Cairo, 28 mar.- El presidente de la Asamblea Constituyente egipcia, Saad el Katatni, vaticinó hoy que le espera "una difícil misión" en la elaboración de la nueva Constitución de Egipto, ante la polémica surgida entre las fuerzas islamistas y laicas.

Katatni hizo el anuncio al término de la primera sesión de la asamblea, que fue boicoteada por la cuarta parte de sus cien miembros, entre ellos integrantes de fuerzas liberales como el partido Al Wafd o el representante del Tribunal Constitucional, que anunciaron hoy su retirada del comité.

Durante su alocución, expresó su esperanza en que se reincorporen pronto los miembros que se retiraron de la asamblea, y manifestó su confianza en que "pondrán el interés de Egipto ante sus ojos", según recogió la agencia oficial Mena.

Asimismo, Katatni subrayó la necesidad de que todos se unan para redactar una nueva Carta Magna: "Deseamos que la nueva Constitución represente a todos los estratos del pueblo egipcio".

En la sesión de hoy, se formó una comisión para recoger propuestas sobre la manera con que trabajará la asamblea, y además se acordó mantener contactos con el resto de los miembros que no participaron en la reunión de hoy.

Katatni, que es también presidente de la Cámara Baja egipcia y dirigente de los Hermanos Musulmanes, fue elegido en la reunión de hoy jefe de la Asamblea Constituyente, que también designó a sus comités internos.

La sesión inaugural se celebró en medio de la polémica sobre la formación de dicha asamblea, después de que el Parlamento -dominado por el Partido Libertad y Justicia (PLJ, brazo de los Hermanos Musulmanes) y el salafista Al Nur- aprobase que la mitad del comité estará formado por diputados.

La decisión empujó a una decena de partidos liberales a retirarse de la Asamblea Constituyente y a pedir la reforma de sus criterios de formación, para que sea más representativa de todas las partes de la sociedad egipcia.

La última fuerza en tomar esa decisión ha sido el partido nacionalista egipcio Al Wafd, tercero más representado en el arco parlamentario, que anunció hoy su retirada y sometió su continuidad a una serie de condiciones.