Pulso en Turquía por el poder entre los generales y el gobierno de Erdogan

  • Ankara.- La detención de 49 oficiales del Ejército y el envío a prisión de algunos de ellos ha aumentado la tensión en un nuevo episodio del pulso por el poder entre los militares y el gobierno islamista moderado de Recep Tayyip Erdogan.

Un tribunal turco ordena prisión preventiva para 7 altos mandos militares
Un tribunal turco ordena prisión preventiva para 7 altos mandos militares

Ankara.- La detención de 49 oficiales del Ejército y el envío a prisión de algunos de ellos ha aumentado la tensión en un nuevo episodio del pulso por el poder entre los militares y el gobierno islamista moderado de Recep Tayyip Erdogan.

Las televisiones del país emitieron las imágenes de los militares humillados puestos a disposición judicial en el Tribunal de lo Penal de Estambul, que ya ha ordenado prisión preventiva para siete de ellos.

El lunes, 17 generales retirados, 4 almirantes en activo y 28 oficiales de menor graduación, fueron detenidos por la Policía a petición de la Fiscalía de Estambul.

La tensión política en Turquía causada por estas detenciones ha desatado altibajos en la bolsa de valores de Estambul, cuyo principal índice perdió hoy un 4,2 por ciento.

Los medios de comunicación turcos han subrayado que se trata de la primera operación contra altos mandos del Ejército de este calado en toda la historia de la República.

A los detenidos se les acusa de haber ideado un plan de golpe de Estado en 2003 y cuyo nombre en clave era "Balyöz" (Mazo).

Con ese complot querían atentar contra dos mezquitas en Estambul, derribar un avión militar turco en el Mar Egeo para forzar un enfrentamiento con Grecia y encarcelar a intelectuales críticos con el Ejército, para así forzar la imposición de la ley marcial.

Algunos generales presuntamente implicados han explicado que no se trataba de un plan de golpe de Estado, sino de "supuestos escenarios" discutidos durante un seminario.

También denunciaron que el tema de los atentados a mezquitas y el derribo de un avión fueron incluidos en los documentos por personas que intentan dañar el prestigio de las Fuerzas Armadas.

Militares retirados, en declaraciones a la televisión turca, han llegado a afirmar que los documentos fueron falseados por la comunidad religiosa de Fethullah Gülen, cercana al Gobierno islamista moderado de Erdogan.

Los antiguos comandantes de las Fuerzas Aéreas Ibrahim Firtina, el de la Marina Özden Örnek y los del Primer Ejército de Tierra, Çetin Dogan y Ergin Saygun, se han negado a testificar ante la policía, según informaron sus abogados.

"Cuando fueron preguntados sobre si habían ideado poner bombas en mezquitas, nuestro clientes se enfadaron. Se les hicieron unas 80 preguntas pero declinaron contestarlas", dijo uno de los abogados en declaraciones a la prensa turca.

Estos antiguos altos mandos del Ejército aún no han sido puestos a disposición judicial, esperan en habitaciones de un comisaría de Policía y están siendo tratados con especial atención, según los diarios locales.

Como reacción, los altos mandos en activo del Ejército se reunieron ayer con carácter extraordinario en el Cuartel General del Estado Mayor, en Ankara, para discutir "la seria situación" en el país tras las detenciones.

En los pasillos de la capital turca se especula con la posibilidad de que, durante una reunión de urgencia ayer entre el viceprimer ministro, Cemil Çiçek, y el jefe del Estado Mayor, Ilker Basbug, éste amenazó con que la cúpula castrense podría dimitir en bloque de seguir los arrestos.

Çiçek reconoció haberse reunido con Basbug, pero desmintió los rumores diciendo que habían hablado de otro tema.

Las dos principales formaciones políticas de la oposición, el Partido Republicano del Pueblo (CHP, nacionalista laico) y el Partido de Acción Nacionalista (MHP, ultraderechista) han acusado al gobierno de Erdogan de causar la tensión en el país.

El MHP, además, afirmó que la única solución es anticipar las elecciones previstas para 2011.

Por su parte, el líder del CHP, Deniz Baykal, aseveró que estos acontecimientos no son un proceso judicial contra los golpistas sino un proceso de confrontación del gobierno del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) contra los militares.

Sin embargo, los columnistas que apoyan al gobierno subrayan que el arresto de los militares ha abierto las puertas a quienes mantienen lazos con los complots golpistas para puedan ser perseguidos.

"Grecia, Argentina, España, Italia...todos estos países han saldado las cuentas con su pasado y han llevado a cabo reformas para que su mentalidad y sus instituciones respeten la cultura de la democracia y la legalidad. Esto es lo que ahora está pasando en Turquía", escribió el columnista Hasan Cemal en el diario 'Milliyet'.

Sin embargo, también está un tercer grupo de intelectuales escépticos que, aunque saluda la persecución de los responsables del oscuro pasado de Turquía, teme que el remedio pueda ser peor que la enfermedad.

Mostrar comentarios