10 razones por las que la independencia está perdiendo fuelle en Cataluña

  • Junqueras apenas habla de la secesión y se centra en la financiación para evitar la quiebra. 

    La división en la coalición Junts pel Sí llega al Parlament y Puigdemont se reúne con Pedro Sánchez.

10 razones que demuestran que la independencia está perdiendo fuelle en Cataluña
10 razones que demuestran que la independencia está perdiendo fuelle en Cataluña
Fernando H. Valls

El desafío independentista de Cataluña ha ido, progresivamente, desapareciendo de la agenda de los líderes políticos que defienden esta apuesta. Puigdemont, el defenestrado Mas, Junqueras, la ANC... Todos han bajado el pistón en sus declaraciones, exigencias y amenazas. A continuación se hace un repaso que lo demuestra:Oriol Junqueras ya no habla de independencia. El líder de ERC ha centrado su estrategia en este momento en conseguir salvar a Cataluña de la quiebra. Y, para ello, ha recurrido al Estado español. Ha pedido 7.500 millones del FLA, se ha reunido con Luis de Guindos y ha telefoneado a su archienemigo Montoro. La economía ahora es lo que importa.La división en Juts pel Sí. La coalición que apoya el Gobierno de Carles Puigdemont se ha fracturado ya en dos ocasiones en el Parlament. Si antes actuaban como una piña en su estrategia soberanista, ahora parece que empiezan a mirar por sus intereses en la cámara. La última polémica ocurrió la semana pasada, cuando CDC votó una cosa y ERC, la contraria.La reunión de Puigdemont y Sánchez. Es el primer encuentro del president de la Generalitat con un líder nacional. Llama la atención que un acérrimo defensor de un referéndum se vaya a reunir con el líder del PSOE, que apuesta por una reforma federal de la Constitución. Formas diferentes de abordar el encaje de Cataluña en España, en definitiva.La postura de Convergència. El partido históricamente hegemónico en Cataluña se encuentra en plena refundación. Ahora apuesta por un mayor soberanismo y ha dejado a un lado las, en otro tiempo, amenazas constantes por la independencia. Artur Mas está intentando configurar un nuevo partido que deje atrás cualquier implicación con la corrupción.Los independentistas no están aprovechando que el Gobierno está en funciones. La interinidad del Ejecutivo de Rajoy no está siendo, efectivamente, aprovechada para plantear un órdago al Estado. Se ha bajado el pistón y ya se empiezan a escuchar declaraciones que ponen en duda que el llamado "proceso de desconexión" sea posible.Petición al FLA. Enlazando con la nueva estrategia de Junqueras, la Generalitat se encuentra en una situación extrema desde el punto de vista económico. Y, para evitar la quiebra, ha vuelto a recurrir al Estado central. Hacienda, por su parte, está obligada a aportar liquidez, pero también controla esos fondos para que no sean destinados a otros fines, como la independencia.La amenaza de Moody's. Otro hecho que demuestra que las autoridades catalanas están cada vez más preocupadas por la economía y que han dejado a un lado la independencia es la amenaza de Moody´s. La agencia ha puesto en revisión negativa el rating de Cataluña y sus dirigentes se han puesto manos a la obra para acabar con la situación de incertidumbre.La desconexión ya no es prioritaria. El Govern ha dejado claro en alguna ocasión que su prioridad es la lucha contra la pobreza. Ese objetivo se sitúa incluso antes que la independencia, lo que viene a decir que el proceso de desconexión no se llevará a cabo hasta que se consiga acabar con la probreza en Cataluña.Las polémicas de Ada Colau. Otra muestra importante del clima que ahora se vive en Cataluña es la actitud que está teniendo la alcaldesa Barcelona en determinados asuntos. Su rifirrafe con los militares o el Padrenuestro blasfemo demuestran que Colau tiene otras prioridades antes que apostar por el referéndum y el derecho a decidir.El nuevo líder de UGT ha moderado ahora su discurso. Josep María Álvarez ha rebajado su discurso en relación al encaje de Cataluña en España. La postura de UGT es importante en el socialismo y el sucesor Cándido Méndez ha pasado de ser pro derecho a decidir a tener una postura tibia en este asunto. Sus posiciones estuvieron más cercanas a Podemos que a Ferraz.

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