Rebeldes comunistas atacan convoy que transporta las máquinas de voto electrónico

  • Manila.- Presuntos rebeldes comunistas del Nuevo Ejército del Pueblo (NEP) atacaron hoy un convoy militar que transportaba máquinas de voto electrónico para las elecciones del lunes en el este de Filipinas, informaron fuentes del Ejército.

Ritmo frenético para garantizar las elecciones automatizadas en Filipinas
Ritmo frenético para garantizar las elecciones automatizadas en Filipinas

Manila.- Presuntos rebeldes comunistas del Nuevo Ejército del Pueblo (NEP) atacaron hoy un convoy militar que transportaba máquinas de voto electrónico para las elecciones del lunes en el este de Filipinas, informaron fuentes del Ejército.

El suceso ocurrió en la isla de Masbate, donde los guerrilleros detonaron una bomba artesanal al paso de dos vehículos blindados cerca de la aldea de Pawikan, según el comandante Harold Cabunoc.

No hubo heridos, pero parte de las máquinas resultaron dañadas a sólo cuatro días de la votación, mientras la Comisión Electoral trabaja para resolver todos los problemas técnicos que han surgido con el nuevo sistema.

Por otro lado, supuestos miembros del NEP secuestraron en la provincia de Surigao del Sur, en la sureña isla de Mindanao, a un candidato a alcalde y tres de sus escoltas.

La guerrilla comunista ingresa durante las campañas electorales decenas de millones de dólares que extorsiona a los candidatos.

Según las fuerzas de seguridad filipinas, cada aspirante tiene que pagar al NEP una determinada cantidad de dinero en función del cargo, de tal forma que un candidato a gobernador debe desembolsar 20 millones de pesos (441.355 dólares o 345.032 euros), frente a los apenas 5.000 pesos (110 dólares o 86,3 euros) de un concejal.

Un 20 por ciento de este "impuesto revolucionario" se destina a financiar la organización y comprar armas y munición, pero el resto se lo quedan los líderes de la misma, según el Ejército.

El NEP mantiene que el chantaje a políticos es necesario para garantizar que éstos no intimiden a los votantes y las elecciones se celebren "como una auténtica expresión de la voluntad democrática popular".

Fundado por el ilegal Partido Comunista de Filipinas en 1969 como su brazo armado, cuenta con entre 5.700 y 7.200 combatientes regulares.

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