Reunión de Estados Unidos y Bolivia termina con resultados vagos y modestos

  • Una reunión de delegaciones de Estados Unidos y Bolivia realizada hoy en La Paz concluyó con resultados muy vagos y modestos, incluido un convenio por el que la agencia de cooperación internacional USAID otorga una ayuda en salud de 22 millones de dólares para los próximos seis años.

La Paz, 28 feb.- Una reunión de delegaciones de Estados Unidos y Bolivia realizada hoy en La Paz concluyó con resultados muy vagos y modestos, incluido un convenio por el que la agencia de cooperación internacional USAID otorga una ayuda en salud de 22 millones de dólares para los próximos seis años.

Fue la primera cita de trabajo tras la firma del "Acuerdo Marco" suscrito el pasado 7 de noviembre en Washington para intentar normalizar las relaciones bilaterales, afectadas por la expulsión recíproca de embajadores en septiembre de 2008.

La ayuda en salud de unos 3,6 millones anuales, el único acuerdo con cifra, será otorgada por USAID, agencia a la que el presidente boliviano, Evo Morales, acusó este mes de promover el espionaje de organizaciones no gubernamentales y a la que ha amenazado en otras ocasiones con expulsarla del país.

La reunión fue encabezada por el subsecretario estadounidense adjunto en funciones para América Latina, Kevin Whitakler, y la ministra boliviana de Planificación, Viviana Caro.

Un comunicado conjunto señala que ambos países confirmaron su intención de restablecer embajadores en La Paz y Washington, pero no señalan cuándo puede concretarse.

Las dos naciones anuncian que promoverán medidas para fortalecer la cooperación judicial, la lucha contra el narcotráfico, la ayuda al desarrollo y el comercio, entre otros campos, pero sin dar mayores detalles en ninguno de ellos.

Whitaker dijo a los medios que el "Acuerdo Marco" se aplicará en "un régimen de respeto mutuo" y ratificó el compromiso de Washington de hacer realidad los programas de ayuda.

Caro destacó el convenio en salud como muestra de un cambio en la forma de invertir los recursos, ya que nueve de los 22 millones serán administrados por Bolivia.

Sobre la petición de La Paz de acelerar la extradición del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada (1993-1997 y 2002-2003), que reside en Estados Unidos y está acusado de genocidio en Bolivia, Whitaker dijo solo que ambos países tienen el compromiso de mantener cooperación judicial.

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