Las modas entre las mujeres para conseguir el cuerpo ideal a veces roza lo enfermizo.
Si hace unas semanas se hablaba de la 'cintura A4', ahora hay una tendencia entre las féminas, sobre todo en Instagram, para conseguir una 'cinturita de avispa' que acaba con costillas rotas o incluso con problemas reproductores.
Se trata del 'Waist Training' (colocarse un corsé hasta quedarse casi sin respiración) que han puesto de moda famosas de la talla de Kim Kardashian, Kylie Jenner, Amber Rose, Jessica Alba o Lindsay Lohan.‘Breathless, faint and in pain': Express writer reveals UGLY truth behind waist training https://t.co/iDwRxNY9XX pic.twitter.com/LgS3wO6kgQ— Daily Express (@Daily_Express) 14 de abril de 2016
Como explica Playground, los corsés modernos están fabricados de látex. Algunas de las marcas que lo venden bajo el eslogan "Siéntete sexy y segura" prometen una reducción permanente del abdomen si se utiliza unas cuatro horas al día.
Según los fabricantes (atención) si haces ejercicio con el, la grasa de la cintura se redistribuye por zonas del cuerpo que ahora interesan, como el pecho o el trasero.
Los médicos dan la voz de alarma
Ante tan avalancha de mujeres lanzándose a probar esta 'locura' de la época Renacentista, los médicos han avisado que lo único que consiguen con esto es oprimir los huesos (las costillas flotantes) y aplastar los órganos de sus víctimas.
Su uso prolongado puede desplazar el estómago más allá del diafragma, dañar la columna, el hígado, el colon o el intestino delgado.
Al final, lo más efectivo es hacer ejercicio de forma regular y comer sano.
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