Suzuki renunció a pedir ayudas para la mejora de la competitividad en 2012

  • La multinacional japonesa Suzuki, que el próximo 31 de marzo cerrará su planta de fabricación de motocicletas en Gijón, la única con que contaba en Europa, renunció a acudir en 2012 a la convocatoria de ayudas del Programa de Fomento de la Competitividad de Sectores Estratégicos Industriales.

Oviedo, 13 feb.- La multinacional japonesa Suzuki, que el próximo 31 de marzo cerrará su planta de fabricación de motocicletas en Gijón, la única con que contaba en Europa, renunció a acudir en 2012 a la convocatoria de ayudas del Programa de Fomento de la Competitividad de Sectores Estratégicos Industriales.

Así lo refleja el Gobierno en su respuesta a una pregunta parlamentaria del senador de IU por Asturias, Jesús Iglesias, relativa a la situación de la factoría, en la que hoy se firmó el ERE de extinción para los 169 trabajadores de la planta gijonesa encargados de las labores de producción de motocicletas.

El Gobierno asegura que el pasado año modificó esta línea de ayudas, hasta entonces limitadas a la fabricación de automóviles, para que las ayudas pudiesen ser solicitadas por cualquier tipo de empresa, independientemente de su sector de actividad.

A esta convocatoria, añade el Ejecutivo, acudieron cuatro empresas fabricantes de motos y motocicletas, entre las que no figuraba Suzuki, que no fueron beneficiarias de las ayudas porque los planes de competitividad presentados no alcanzaron la prioridad suficiente para recibirlas conforme a los criterios establecidos.

En su respuesta al parlamentario de IU, el Gobierno asegura haber mantenido contactos con el Ejecutivo del Principado para definir alternativas posibles al cierre de la planta y buscar una solución "más beneficiosa" para sus cerca de 200 empleados, 30 de los cuales seguirán trabajando a partir de marzo en el departamento comercial.

El Ministerio asegura, por último, que en dicho proceso no se han definido todas las posibles opciones por lo que afirman que se seguirá realizando "un seguimiento cerca del asunto".

Para el senador de IU, la respuesta obtenida del Gobierno demuestra su "escaso interés" en buscar soluciones para la factoría de Suzuki en Gijón.

El ERE pactado con la dirección de la empresa contempla una indemnización de 40 días por año trabajado con un tope de 37 mensualidades y 12.500 euros de lineal e incorpora una cláusula que asegura como mínimo 45 días y 42 mensualidades para todos los trabajadores despedidos.

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