Unidos Podemos lograría el ansiado 'sorpasso' al PSOE y el PP se distancia

La nueva alianza de izquierdas entre Podemos e Izquierda Unida lograría desplazar al PSOE de la segunda posición. El 'sorpasso' ha llegado... y aventaja a los socialistas en tres puntos. Así lo recoge una encuesta elaborada por Metroscopia para el diario 'El País', en la que también se resalta que el Partido Popular obtendría rendimiento de la escasa actividad que últimamente ha realizado Mariano Rajoy. El PP se consolidaría así como primera fuerza, incluso con un mayor apoyo del que obtuvo el pasado 20-D. El respaldo hoy sería del 29,9%. 

Unidos Podemos, la marca con la que se ha registrado la unión entre Iglesias y Garzón, conseguiría, si se celebraran las elecciones este domingo, el 23,2% de los votos, según el sondeo de Metroscopia. Esto significa un punto y dos décimas menos que la suma de lo que obtuvieron ambas formaciones por separado en los pasados comicios. El hecho de ir juntos a las elecciones serviría para que la coalición sumara más escaños.

Sin embargo, según dice 'El País', podría ser una victoria a medias, puesto que "la imprevisible ley electoral española, con su reparto de restos y la distribución irregular de los apoyos entre las distintas circunscripciones, podría producir la paradoja de que Unidos Podemos obtuviera más votos que el PSOE y, sin embargo, menos escaños. Y ahí surgiría la batalla por el liderazgo y la legitimidad para encabezar un pacto". 

La encuesta también evidencia que en las próximas elecciones se producirá una abstención alta del electorado. La expectativa de participación hoy es del 68%. Esto supone cinco puntos menos que en las pasadas elecciones, según El País, y seis menos que la media histórica desde que hay democracia. "Esa baja participación, como ya han indicado anteriores sondeos, favorece al PP, que tiene un suelo de votantes más fiel que el resto de partidos", señala el medio.Los votantes del PP respaldan en su mayoría el bipartidismo 

El candidato del PP, Mariano Rajoy, mantiene entre los suyos un alto índice de aprobación. Además, los votantes del partido respaldan de forma mayoritaria el bipartidismo tradicional. 

Lo que queda claro es la alta fidelidad en el voto de los seguidores del PP, que apoyan en definitiva la 'estrategia polarizadora' con que afronta Rajoy esta campaña. El líder del partido intenta convencer con un supuesto discurso de "sensatez y moderación", ante lo que él interpreta como una "amenaza del extremismo de izquierdas”.

Por otro lado, el líder socialista, Pedro Sánchez, tiene un gran objetivo: evitar que el PSOE retroceda casi dos puntos respecto al resultado del 20-D. Pero por ahora no lo consigue: pierde 1,8 puntos respecto al resultado de las pasadas elecciones. Y ve además cómo su principal adversario en la izquierda le sobrepasa.

La formación de Rivera parece ser la única que obtendría rédito de los votantes que exigen diálogo y pactos. Obtendrían un apoyo del 15,5%, es decir, 1,6 puntos más que su resultado del pasado mes de diciembre. Sin embargo, son los que respaldan a Rivera los que según Metroscopia muestran más dudas sobre si acudir o no a las urnas. 

Claro que el principal reto para el líder de Ciudadanos será concretar en las urnas lo que anticipan las encuestas. ¿Podrá realmente conseguirlo? Las altas expectativas no siempre se traducen en votos...

Otro de los datos concluyentes del sondeo es que seis de cada diez votantes siguen situados en las zonas templadas del espectro ideológico político (centro y centroizquierda), aunque el pesimismo entre la población se mantiene e incluso se agrava, hasta el punto de que un 94% de los encuestados define como "mala" la situación política, lo cual no tiene precedentes en los últimos 20 años, señala El País.

Para Rajoy es una mala noticia 

El presidente del Gobierno en funciones valoró este domingo la encuesta de Metroscopia y cree que el adelantamiento de Podemos al PSOE en las elecciones generales del 26 de junio sería "una pésima noticia para España" y pide a los socialistas que "despierten". Asimismo, considera que "nadie puede pedir su cabeza" si vuelve a ganar los comicios y que los populares se pueden entender "en muchas cosas con el PNV".