Madrid, 8 nov.- Uno de los secuestradores de un médico portugués al que retienen en un coche en la zona de Aloia, en Pontevedra, es un peligroso expreso que va armado y que nada más salir de la cárcel hace un mes descerrajó dos tiros a dos personas por un ajuste de cuentas.
Fuentes de la investigación han explicado a Efe que este exrecluso de origen gallego y un compinche de nacionalidad portuguesa mantienen secuestrado a un médico luso, con el que viajan en un vehículo robado por la zona de Aloia, limítrofe con Portugal.
La Guardia Civil mantiene un dispositivo para capturar a los secuestradores, que ya han obligado al médico a sacar dinero de cajeros automáticos, tal y como han podido comprobar los agentes por los extractos bancarios.
Ambos viajan en un Mercedes robado en Portugal, donde ayer secuestraron al médico, y son los autores del atraco a sendas gasolineras en Tuy y Tomiño (Pontevedra), con apenas tres días de diferencia.
Hace un mes, el preso gallego salió de la cárcel y lo primero que hizo, según las fuentes, fue disparar a dos personas con las que tenía cuentas pendientes. Ambas están hospitalizadas en estado grave.
En los siguientes veinte días, este exrecluso perpetró varios delitos en Portugal y en Galicia, como los citados atracos a las gasolineras y el robo de coches.
Ayer mismo, los dos delincuentes secuestraron al médico y consiguieron fugarse en un control de la Guardia Civil, que ha acordonado la zona de Aloia, un área montañosa donde está desplegado el dispositivo.
Según la descripción de las fuentes, el expreso es un hombre muy peligroso, muy alto, perfectamente reconocible y va armado.
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