UP exige al Gobierno colombiano que reconozca su exterminio como un genocidio

Bogotá, 28 oct.- La líder del partido de izquierdas Unión Patriótica (UP), que sufrió la persecución y el exterminio de miles de sus integrantes en los años ochenta, Aída Avella, exigió hoy al Gobierno colombiano que reconozca esta situación como genocidio ante la comunidad internacional.

Avella, que intervino en el V Congreso Internacional de Derechos Humanos organizado por la Universidad Autónoma de Colombia, recordó el proceso abierto en los años noventa ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que se reconociera su persecución por paramilitares y agentes del Estado.

La dirigente definió el caso de la Unión Patriótica, nacida en 1986 como salida política al fallido proceso de paz impulsado por el entonces presidente Belisario Betancur, como "el más dramático del continente, el más documentado" con "6.526 violaciones a los derechos humanos, 3.200 asesinados y más de 500 desaparecidos".

Sin embargo, lamentó que estas cifras no hayan sido reconocidas por el Ejecutivo, algo que consideró necesario en el marco del actual proceso de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que se desarrolla desde noviembre de 2012 en La Habana.

"El Gobierno niega a las víctimas de la Unión Patriótica y niega su responsabilidad en el exterminio. (...) Exigimos que nos reconozcan ante la CIDH", dijo Avella.

Según la líder de este partido, que se exilió en Suiza en 1996 tras un fallidoatentado en su contra cuando era concejal en Bogotá, la asunción de responsabilidades por parte del Estado contribuiría a la paz del país.

"Eso empezaría con una actuación contundente del Estado reconociendo a las víctimas" de la UP, indicó.

Para Avella, "es indispensable que el Estado modifique su conducta frente al genocidio de la Unión Patriótica" y que contribuya a esclarecer los hechos e identificar a los responsables de la persecución al partido, que según afirmó continúa siendo "una realidad actual".

"Seguimos siendo víctimas de amenazas y atentados bajo los mismos argumentos de la intolerancia", sostuvo la líder, que integró la tercera delegación de víctimas que viajó a Cuba a finales de septiembre para participar en el proceso de paz.

Por todo ello, emplazó al Gobierno a actuar e insistió en que desde la Unión Patriótica seguirán apoyando los diálogos de La Habana junto al resto de las víctimas del conflicto armado.