Violencia género. Cocemfe detectó más de 150 casos de violencia de género en mujeres con discapacidad durante 2013

La Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe) detectó en 2013 más de 150 casos de violencia en mujeres con discapacidad gracias al programa de prevención de violencia de género que desarrolla junto a la Confederación Estatal de Mujeres con Discapacidad (Cemudis) y con el apoyo de la Obra Social La Caixa.
Esta iniciativa, denominada ‘Programa para la prevención de la violencia contra las mujeres con discapacidad’, se desarrolla desde 2010 en el marco del programa ‘Violencia: Tolerancia Cero’ de la Obra Social La Caixa, y está presente en la actualidad en las comunidades autónomas de Andalucía, Aragón, Asturias, Cataluña, Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, Galicia y Extremadura, según informó Cocemfe en una nota de prensa.
La organización explica que el año pasado se realizaron 35 talleres de apoyo psicosocial, 20 talleres de consolidación y 16 acciones formativas dirigidas a personal técnico de administraciones y entidades del tercer sector.
“A estos datos hay que sumar 821 entrevistas a mujeres, 216 atenciones individualizadas y 111 derivaciones al programa ‘Incorpora’ de Obra Social La Caixa con el objetivo de facilitarles un trabajo, alcanzando un total de más de 2.000 mujeres participantes, un 75% más que en el año 2012”, agrega la nota.
El presidente de Cocemfe, Mario García, destaca "la importancia del programa a la hora de luchar contra la discriminación múltiple de las mujeres y niñas con discapacidad, las cuales están mucho más expuestas a la violencia de género, al abuso sexual, al abandono y al maltrato físico y psicológico".
Además, alerta de que "si para las mujeres sin discapacidad es muy difícil salir de la violencia por todos los condicionantes y dependencias psicológicas y socioeconómicas a las que se enfrentan, para las mujeres con discapacidad es aún más complejo. Están en un entorno más hostil, donde los recursos disponibles para combatir la violencia de género no las tiene en cuenta y con una disponibilidad muy reducida de plazas adaptadas a su situación en centros y pisos de acogida".
Para el presidente de la confederación, "con esta iniciativa estamos proporcionando a las mujeres objeto de maltrato los instrumentos para lograr su empoderamiento, que sean las protagonistas de su propia vida y tomen sus propias decisiones. Y para ello se intenta que sean conscientes de la situación que están viviendo, que abandonen cualquier sentimiento de culpa que las haga pensar que se lo merecen precisamente por tener una discapacidad, se busca incrementar sus bajos niveles de autoestima y que sean ellas mismas las que encuentren las posibilidades que hay en su entorno para acabar con la violencia".
La organización indica además que el programa tiene un enfoque preventivo, con el que se dota a las mujeres participantes de las herramientas y nociones necesarias para detectar y evitar posibles maltratos en el futuro, desde los más sutiles hasta los que se presentan de la forma más violenta.