El cambio hacia un futuro mejor comienza en las personas. Por eso, a la hora de plantear el nuevo propósito de compañía es fundamental que éste cale en toda la organización y cada empleado lo entienda y se sienta parte activa.
Es el caso de Philip Morris International. La compañía tabaquera está decidida a alcanzar un futuro sin humo, planteamiento con el que ha marcado una visión disruptiva a nivel mundial y que comparte con un equipo diverso, equitativo y alineado con este objetivo.
Un cambio de paradigma toca, necesariamente, a cada una de las ramas de la empresa. Por ello, no es de extrañar que el equipo de PMI esté compuesto de perfiles profesionales en diversos campos decididos a alcanzar un objetivo ambicioso y que se aleja de la concepción que, hasta ahora, se tenía de las compañías tabaqueras.
Las ramas del cambio
Dentro este cambio, intervienen múltiples equipos. En la compañía trabajan hoy cerca de 70.000 empleados, entre ellos alrededor de mil son científicos, ingenieros y técnicos que se vuelcan en la investigación científica y el desarrollo de productos sin humo.
Los datos científicos que ya están sobre la mesa son esperanzadores: el cambio hacia alternativas libres de humo -como los dispositivos calentamiento de tabaco, entre otras- permitirá que todos aquellos adultos que no dejen de fumar tengan una opción mejor al cigarrillo.
Para el desarrollo de este tipo de productos, los científicos de Philip Morris trabajan sobre la base de eliminar la combustión y el humo, la principal causa de enfermedades relacionadas con el hábito de fumar, demostrando que cuando se elimina la combustión se reduce considerablemente la exposición a sustancias químicas nocivas. Siempre, eso sí, teniendo algo claro: la única forma de alcanzar el riesgo cero es dejando de fumar y de consumir productos con tabaco y nicotina por completo.
Estos cuatro perfiles son claros ejemplos de la diversidad, el expertise y el talento que forman el cambio desde Philip Morris International.
Tommaso Di Giovanni – Vicepresidente de Comunicación Internacional
“Al igual que se reduce lo ‘malo’ que está presente en la comida, es posible aplicar un concepto similar en el tabaco”, explica Tomasso, uno de los expertos encargados de transmitir el cometido de la compañía a nivel global.
Explica convencido cómo en 2014 PMI se planteó acabar con el tabaco de combustión, siendo la primera tabaquera en liderar el cambio: “Cada esfuerzo de nuestra compañía debe estar dirigido a reducir la toxicidad de los productos de tabaco”, apunta.
Además, deja claro que su planteamiento está dirigido, exclusivamente, a aquellos adultos que no tienen previsto dejar de fumar. “Hay que ofrecer una alternativa para todos ellos”, señala. “Estamos usando nuestro conocimiento para poder ofrecer a los fumadores algo que les permita el cambio a alternativas con menos riesgo que los cigarrillos de combustión”.
Gizelle Baker – Vicepresidenta de Relaciones Médicas Global
Dentro del área científica, multitud de profesionales se vuelcan en demostrar la eficacia de los productos sin humo a la hora de reducir el riesgo de sufrir enfermedades derivadas del hábito fumar. “La inspiración viene de prácticas farmacéuticas”, explica esta experta. “Para dar evidencias, se necesita a un equipo científico que siga las guías de la FDA y trabaje con los más altos estándares”.
“Hablamos a los consumidores y necesitamos que ellos entiendan el mensaje: los productos sin combustión siguen teniendo riesgo, pero reducen la exposición a sustancias químicas nocivas”, asegura. “Dejar el tabaco es la meta para eliminar esos riesgos, pero cambiar a productos sin combustión ayuda a reducir el problema”.
Desde su posición, hace ver la realidad presente en el cigarrillo convencional. “Cuando quemas, produces cenizas y partículas sólidas; si nos deshacemos de la combustión, también lo hacemos de todas esas sustancias que se acumulan en los pulmones”.
Gizelle es clara: el uso de dispositivos de calentamiento de tabaco y otras alternativas, como los cigarrillos electrónicos, han sido el punto de inflexión de una tendencia: “La presencia de este tipo de productos ha conseguido lo que nunca se había alcanzado: una reducción de venta de cigarrillos en países donde el mercado ha aceptado estas opciones”.
Stefano Volpetti – Presidente del área de Productos Libres de Humo
“Juntos, tenemos la responsabilidad de eliminar los cigarrillos de este planeta”, afirma tajante este experto. Comunicador por excelencia y uno de los líderes del cambio, este profesional habla con claridad del cometido de PMI a nivel global: “Los productos sin humo son el mayor paso que podemos dar como compañía: hay que facilitar el cambio hacia estos productos en todos los fumadores adultos que no van a dejar el hábito”.
En su caso, explica que no existe un producto único que satisfaga todas las preferencias de los fumadores adultos mundialmente. “Por ello, se necesita una cartera de opciones, basadas en la ciencia y libres de humo, con diferentes perfiles en modos de uso, sabor, precio y tecnología”, explica.
Andrea Costantini – Directora de Relaciones Médicas en Latinoamérica y Canadá
La historia de esta médica es todo un ejemplo a la hora de entender el cambio de visión de PMI y, en especial, la necesidad de que su mensaje llegue a la sociedad de forma correcta. Especialista en farmacología clínica, trabajó durante más de 15 años en la industria farmacéutica.
Explica que aceptar la oferta de Philip Morris fue, en un principio, difícil para ella: ¿cómo podía trabajar para una tabaquera una persona especializada en enfermedades respiratorias que, en muchas ocasiones, están causadas por el tabaco?
Fue después de conocer el proyecto, de informarse, de comprobar hechos científicos y ver que el futuro sin humo era posible, cuando decidió unirse. “Es importante que los médicos aprendamos a juzgar la ciencia en sí misma, por su metodología, y no por quién está publicando los estudios”, apunta.
“El cigarrillo es perjudicial. Lo mejor que puede hacer una persona es no empezar a fumar nunca, y lo mejor que puede hacer un fumador es dejar de fumar”, asegura. “Pero, a pesar de saber que los cigarrillos son dañinos, hoy una parte importante de la población a nivel mundial sigue fumando”. Ofrecer alternativas mejores para todos ellos es, hoy, un objetivo primordial.
En lo personal, imagina un futuro sin humo que evite a muchas personas enfermedades como la EPOC, diagnosticada tanto a su padre como a su madre. A todos los que, como ellos, han enfermado o enfermarán a causa del hábito de fumar, dedica su trabajo en el día a día. “A través de la implementación de políticas de reducción de daño en el tabaco vamos a disminuir de manera significativa la carga que el tabaco representa hoy en día en materia de salud pública”, apunta. “Estoy convencida de ello, y esa es la razón por la que estoy trabajando en Philip Morris”.
Esa certeza, que comparte con sus compañeros y con el equipo global, es el motor que hoy mueve a una compañía pionera en imaginar un futuro más allá del humo.
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Fuentes: Entrevistas propias / Visita a Neuchâtel / https://www.pmi.com/media-center/news/why-i-joined-philip-morris-international
