Alquilar habitación a un particular, la otra opción para la final de Lisboa

Óscar Tomasi

Lisboa, 6 may.- La escasez de plazas hoteleras libres y la brusca subida de precios a la hora de encontrar alojamiento para la final de la Liga de Campeones entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid ha disparado la picaresca en Lisboa, donde decenas de particulares ofrecen sus propios pisos y habitaciones.

Los responsables de los hoteles de la ciudad aseguran estar prácticamente llenos para el próximo 24 de mayo, cuando Real Madrid y Atlético de Madrid se enfrentarán por el principal título continental, y ya es difícil también tener habitación en establecimientos de localidades próximas como Cascais o Estoril.

En este contexto -que algunas voces relacionan con la "costumbre" de empresas del sector de guardarse algunas plazas hasta pocos días antes de la fecha indicada con el propósito de que su precio aumente-, no son pocos los lisboetas que tiran de ingenio para intentar sacar provecho de la ocasión.

"Alquilo dos habitaciones para la final de la 'Champions'. 700 euros". Anuncios como éste son fáciles de encontrar a través de Internet, sobre todo en páginas de anuncios por palabras como "Olx", uno de los portales del ramo más famoso de Portugal.

"Lo he puesto esta misma mañana con la idea de intentar hacer algo de dinero. Como ese día se celebra mi cumpleaños, quien venga a mi casa también está invitado a la celebración", explicó en declaraciones a Efe el autor del mismo, cuya vivienda se encuentra en el centro de la ciudad.

Aún hay ofertas más económicas, como la de Joao, con dos hijos, que ofrece dos habitaciones -con dos camas cada una- por 130 euros cada una en una zona próxima al Estadio da Luz, palco del encuentro.

"El principal motivo para hacer esto es el económico, aunque también me gustaría ayudar a los aficionados de los dos equipos. Si yo fuese extranjero y quisiese ver al Benfica en una final, no me gustaría no tener sitio en donde dormir por la abusiva subida de precios de los hoteles", argumentó.

La oferta de particulares -fuera por tanto del circuito legal- llega incluso a viviendas situadas a 40 kilómetros de la capital, cerca de Setúbal. Es el caso de José, quien confía en alquilar su casa de vacaciones para entre diez y quince personas a cambio de 50 euros "por barba".

"Como en los medios dicen que los precios de los hoteles se han disparado, pensé en colocar un anuncio e intentar convencer a algún español", señaló.

Los precios varían en función de los días, el tamaño y la localización de la casa, así como del espacio colocado en alquiler, que puede ser desde un pequeño cuarto hasta un chalé con piscina en los alrededores de Lisboa.

Desde unos modestos cien euros hasta unos desorbitantes 7.000 -que incluyen, eso sí, transporte al estadio el "día D"-, la oferta es dispar y, de hecho, son muchos los que reconocen que todavía no han recibido contacto alguno de posibles interesados.

El interés por presenciar en directo el duelo también ha provocado que la mayoría de hostales hayan colgado el cartel de completo, entre ellos el Inn Lisbon, que no tiene ninguna habitación libre para los días 22, 23 y 24 de este mes.

"Ya teníamos ocupados la mayor parte de las habitaciones mucho antes de saber qué equipos jugarían la final. Muchos alemanes reservaron y cancelaron posteriormente, aunque enseguida sus plazas volvieron a ser ocupadas", detallaron desde el alojamiento.

La cercanía entre Madrid y Lisboa -separados por unos 620 kilómetros- permitirá a algunos hacer el viaje en el día. Incluso particulares de Extremadura ofrecen sus casas para aquellos que deseen presenciar la final en Lisboa, a pesar de encontrarse a más de 300 kilómetros de distancia.

A la polémica generada por la dificultad para encontrar hotel a un precio asequible se suma el escaso número de entradas colocado a disposición del público en general, 3.000 de un total de 61.000, de acuerdo con los números de la UEFA.

Estas entradas fueron sorteadas durante el mes de marzo entre quienes se apuntaron al sorteo por Internet, y no está previsto que se coloquen más a la venta, ni siquiera en taquilla.

La UEFA optó por quedarse 24.000 entradas y las 34.000 restantes las repartió a partes iguales entre Real Madrid y Atlético de Madrid, que serán los responsables de distribuirlas entre sus aficionados.