Icíar Bollaín asegura que Álex de la Iglesia "ha abierto una crisis innecesaria y muy dañina"

Icíar Bollain ha permanecido hasta ahora en silencio en todo lo relativo a la aprobación de la ley Sinde y de la labor negociadora desarrollada por Álex de la Iglesia en todo este tiempo. Pero una frase publicada hoy en un periódico ha colmado su paciencia. Un diario asegura que la vicepresidenta entró ayer en la reunión de la junta de la Academia advirtiendo: "Si se va Alex me voy yo".

Hoy, la realizadora asegura en un comunicado: "No he dicho jamás que si se va Alex de la Iglesia me voy con él", una frase escrita en negrita y subrayada. "No puedo permitir que se malinterpreten ni mis palabras ni mi postura", afirma Bollain. "Lo que dije fue que si eso ocurría, yo no iba a asumir la presidencia, y propuse a otro miembro de la junta para ello, asegura.

"Desde el principio me pareció que si [De la Iglesia] quería dimitir, debía hacerlo y marcharse en ese momento (…) Finalmente se decidió que lo mejor para la Academia y la gala era que Alex de la Iglesia continuara hasta las elecciones y yo apoyé este consenso final".

Ya ayer, en la comparecencia de todos los miembros de la junta tras la reunión, Bollain marcó distancias con el presidente. "La junta le ha tirado de las orejas", dijo. Hoy, esa diferencia queda expresada negro sobre blanco: "No considero que sea el papel del presidente de la Academia  mediar en una ley, ni participar en su redacción. Creo que Alex de la Iglesia en las últimas semanas ha estado representándose a sí mismo y no al colectivo que le votó para presidir la Academia en su nombre y no puedo estar más en desacuerdo con eso".

"Crisis innecesaria"

Pero la realizadora va en su comunicado todavía más lejos y acusa a De la Iglesia de no haber respetado "el sistema democrático que rige la Academia ni a su junta" y, sobre todo, de haber abierto "una crisis innecesaria y muy dañina" para el cine español. "No puedo permitir que nadie piense que tiene mi apoyo en todo esto", concluye.

"Estoy deseando que la Academia vuelva a la normalidad", asegura en el texto, aunque a reglón seguido admite que eso no será posible hasta la celebración de elecciones y la llegada de un nuevo equipo.

Para entender el enfado de Bollain, a lo publicado hoy, hay que sumar el hecho de que en los últimos días se ha visto envuelta en la polémica dimisión de Álex de la Iglesia sin pretenderlo. Mientras ella estaba localizando en Barcelona para su nueva película, la ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, aseguraba que la realizadora sería una buena sustituta para el cargo. Y, aunque es cierto que estatutariamente le correspondería a ella cubrir la vacante, Bollain nunca ha tenido interés en ocupar la presidencia de la Academia, como reafirma en el comunicado de hoy.