Tráfico. La nueva ley de tráfico divide a políticos, automovilistas y víctimas de accidentes


La 18ª reforma de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial, que entró en vigor este viernes, suscita puntos de vista divergentes entre representantes de partidos políticos, asociaciones de automovilistas y entidades de víctimas de accidentes, que discrepan de que la nueva norma repercuta en la mejora de la siniestralidad, en un contexto en el que la mortalidad ha aumentado desde el pasado mes de marzo.
El PSOE, IU y la Asociación Europea de Automovilistas (AEA) coinciden en que la ley no ayudará a reducir el número de víctimas mortales en las carreteras, CiU y el RACE aseguran que bajará la cifra de fallecidos y la Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes DIA y Stop Accidentes confían en que no aumente.
El portavoz de Seguridad Vial y Movilidad Sostenible del PSOE, Juan Carlos Corcuera, aseguró, en declaraciones a Servimedia, que espera “poco” de la nueva ley, que “entra en vigor en un momento no especialmente bueno para la siniestralidad”, al alza desde el pasado mes de marzo.
“Se puede estar produciendo un cambio de tendencia que no deseamos. Desde hace tiempo venimos anunciando desde el Grupo Socialista que cuando hubiera más desplazamientos de vehículos se podía producir un aumento de la siniestralidad, con un parque móvil muy antiguo y mal cuidado como consecuencia de la crisis”, apuntó.
Corcuera destacó que los conductores han percibido que el aumento puntual del límite de velocidad a 130 km/h en algunos tramos de autovías y autopistas, que entrará en vigor cuando se apruebe el futuro Reglamento General de Circulación, “va a ser generalizado”.
“Si a eso añadimos que, en lo que se refiere a las sanciones, tenemos una multa de 1.000 euros por consumo de alcohol y las drogas, pero, en cambio, se puede ir hasta 150 km/h en autovías y autopistas con una sanción de 100 euros y ni un sólo punto. El mensaje que se está lanzando es que se va a suavizar los límites de velocidad, cuando las estadísticas nos dicen que el aumento de la siniestralidad se ha producido sobre todo por excesos de velocidad”, apostilló, antes de añadir que la norma incluye la transposición de una directiva comunitaria para multar a conductores extranjeros que acaba de ser anulada por el Tribunal Superior de Justicia de la UE.
“OPORTUNIDAD PERDIDA”
También se mostró crítica la portavoz de IU, Ascensión de las Heras, que tildó la nueva norma de “oportunidad perdida”, porque es “una apuesta clarísima por el fomento del uso del coche” en lugar de por “la movilidad sostenible y la eficiencia medioambiental”.
Además, comentó que el casco obligatorio para los ciclistas menores de 16 años en ciudad desincentivará el uso de la bicicleta y criticó el incremento puntual y futuro del límite de velocidad a 130 km/h en tramos de autopistas y autovías, al tiempo que se mostró convencida de que la ley “no va a ayudar” al descenso de la mortalidad porque la siniestralidad está vinculada al “deterioro palmario de las carreteras” y a “la antigüedad de los coches”.
Por el contrario, el portavoz de Seguridad Vial y Movilidad Sostenible de CiU, Jordi Jané, auguró que la ley contribuirá al descenso en la cifra de muertos en carreteras, lo cual debe ir aparejado a una buena señalización y el mantenimiento de las carreteras, además de que se imparta educación vial en los centros escolares, que consideró “una asignatura pendiente” en materia de seguridad vial.
“Lo principal es que contribuya a la prevención de accidentes de tráfico y a proseguir en esa tendencia de los últimos años, con el objetivo marcado del ‘horizonte cero’, que no haya muertos en nuestras carreteras”, señaló Jané a Servimedia.
Jané apeló al consenso político en materia de seguridad vial y evitar “la crítica fácil” porque “no nos lleva a ningún sitio”, y a que continúen las campañas de concienciación, en tanto que consideró “buena medida” el futuro aumento a 130 km/h en algunos tramos de vías de gran capacidad porque supone “adecuarse a lo que pasa en las autovías y autopistas”. “El peligro está en las vías secundarias”, remarcó.
“OLOR A RECAUDACIÓN”
Por otro lado, el presidente de AEA, Mario Arnaldo, se mostró “decepcionado” con la nueva ley, en declaraciones a Servimedia, porque, a su juicio, “bajo la bandera de la seguridad vial encontramos aspectos que tienen un olor a recaudación”, como la legalización de “las multas en diferido” que pueden poner agentes de movilidad sin detener el vehículo cuando estén regulando el tráfico y “perpetúa la indefensión de las víctimas de accidentes de tráfico cuando estén implicados animales de caza”.
Además, aunque se mostró de acuerdo “en el fondo” en no tolerar la conducción después de haber consumido bebidas alcohólicas o drogas, apostó por “programas de desintoxicación en lugar de utilizar las multas”.
Arnaldo afirmó que la ley “en absoluto” ayudará a reducir el número de personas que pierden la vida en las carreteras y censuró que “se prime los intereses de una minoría de empresas privadas en los cursos de recuperación de puntos ante el interés general de los ciudadanos”.
Sin embargo, más entusiasta se mostró otro representante de los automovilistas, el director de Seguridad Vial del RACE, Tomás Santa Cecilia, que auguró a Servimedia que la ley “va a salvar muchas vidas en la carretera” y deseó que “los 26 millones de conductores asuman cuanto antes las nuevas modificaciones con vistas a la reducción de la siniestralidad”. “El gran objetivo es que no haya ningún conductor español que no conozca las novedades de la norma de seguridad vial”, dijo.
Además, aplaudió el uso obligatorio del casco entre los ciclistas menores de 16 años en la ciudad y confió en que “ningún menor viaje sin sistema de retención infantil y ninguna persona que haya consumido drogas conduzca un coche”.
“LA PUERTA ABIERTA A LOS 130 KM/H”
En cuanto a las víctimas de accidentes, el presidente de DIA, Francisco Canes, consideró “positiva” la ley en algunos aspectos, pero señaló que otros “deberían haber sido mejorados”. “No vemos con buenos ojos que se deje la puerta abierta a los 130 km/h, pensamos que hubiera sido una buena oportunidad para establecer la tasa 0 de alcohol para la conducción y que la obligatoriedad del casco ciclista en ciudad tendría haber sido extendida para todos los usuarios. Igualmente nos mostramos contrarios a la reforma realizada en lo que respecta a la responsabilidad en accidentes por especies cinegéticas”, comentó.
La presidenta de Stop Accidentes, Ana Novella, anheló, en declaraciones a Servimedia, que la norma contribuya a la reducción de la siniestralidad y que “esté continuamente a la vista de todos para que nadie se confíe”.
“Hay puntos en los que estamos a favor, como el casco en los ciclistas menores de 16 años y sanciones más duras para el consumo de alcohol y de estupefacientes, pero no en el incremento de la velocidad en tramos de autopistas y autovías porque conlleva una flexibilidad para los conductores, que estarán más pendientes de los paneles que anuncian el límite de velocidad”, recalcó.

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