En enero

La inflación de Turquía se dispara casi al 50% y marca máximo en dos décadas

El banco central del país, en contra de la opinión de economistas, ha recortado los tipos de interés en 500 puntos básicos desde septiembre hasta el 14%.

Erdogan Turquía
Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía
Agencia EFE

La tasa de inflación en Turquía continúa descontrolada y en enero rozó el 50%, marcando máximo desde abril de 2002, lo que dificulta la política monetaria que defiende el actual presidente, Recep Tayyip Erdogan, de reducir tipos de interés para rebajar los costes de endeudamiento. En concreto, la tasa interanual escaló al 48,69%, frente al 36,08% registrado en diciembre, lo que representa la mayor subida de los precios desde que hace dos décadas asumiera el cargo de primer ministro el actual.

En términos mensuales, el IPC turco subió un 11,10% en enero, después del alza mensual del 13,58% en diciembre de 2021. En enero, el menor incremento anual de los precios fue del 10,76% en comunicación, así como en educación con un 18,67%, ropa y calzado con el 25,32% y salud con el 28,63%. Por su parte, transporte con una alza del 68,89%, alimentación y bebidas no alcohólicas, con el 55,61%, y mobiliario y enseres del hogar, con el 54,53%, fueron los rubros donde se registraron los mayores incrementos anuales.

El nuevo repunte de la tasa de inflación en Turquía se conoce días después del nombramiento de Erhan Çetinkaya como nuevo presidente del Instituto de Estadística de Turquía (Turkstat), responsable de elaborar el índice de precios, tras la salida de Sait Erdal Dinçer, quien ocupó el cargo entre marzo de 2021 y enero de 2022.

El Banco Central de Turquía mantiene los tipos de interés en el 14%, tras pausar en enero la senda de rebajas del precio del dinero, después de haber acometido cuatro recortes consecutivos entre septiembre y diciembre de 2021. No obstante, Erdogan sigue defendiendo la visión poco ortodoxa de que las tasas de interés más altas alimentan la inflación. 

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