Venezuela teme un apagón total en todo el país antes de un mes

Desde el Gobierno venezolano también indicaron que se trató de "una acción delictiva y aislada de sabotaje". Pero, más allá de las versiones oficiales que intentan calmar a una población desesperada, lo cierto es que Venezuela teme un apagón global e inaudito en poco menos de un mes.

La represa hidroeléctrica de El Guri, la más importante del país, se encuentra a apenas cinco metros del colapso energético. La cota del inicio de ese colapso es de 244 metros sobre el nivel del mar. En la actualidad se sitúa en 249, el nivel más bajo de su historia en plena temporada seca y sin lluvias. Estos datos son oficiales y se encuentran en la propia web de Corpoelec.

Todos estos elementos presagian un escenario dramático. Según un informe del Grupo Ricardo Zuloaga (GRZ, especialista en temas energéticos) el 60% de la energía termoeléctrica ya no está disponible. Un documento presentado estos días por GRZ ante la Asamblea Nacional venezolana señala que, cuando se llegue al dramático límite indicado (244), se dañarán de manera irreversible todas las máquinas de El Guri porque se generarán burbujas de aire que ingresarán en las turbinas del mayor proveedor eléctrico del país. Esto ocurriría en un plazo máximo de 30 días. 

Alberto Pérez, representante venezolano del partido Voluntad Popular en Europa, asegura a lainformacion.com que el país avanza de manera irreversible "hacia el apagón general más grande de su historia, en una época donde en Venezuela no se registran lluvias. La temporada de precipitaciones comienza en mayo".

Mientras tanto, los apagones eléctricos puntuales siguen sucediéndose por toda la geografía venezolana. En Sabana Grande, El Rosal y La Castellana han tenido lugar los últimos, en apenas un plazo de una semana. Por su parte, Luis Motta Domínguez, ministro de Energía Eléctrica venezolano, sigue insistiendo ante la opinión pública en que el fenómeno climatológico de El Niño y los sabotajes son los motivos de los problemas eléctricos venezolanos.

Pero tanto los estudios privados (como el de GRZ) y los peritajes técnicos encargados por la oposición y hasta por la propia Asamblea Nacional, coinciden en afirmar que en la actualidad la industria siderúrgica venezolana ya se encuentra virtualmente paralizada.

Las empresas siderúrgicas han acatado sin otra opción la propia 'recomendación' cursada por Motta Dominguez, quien les advirtió el 19 de febrero pasado que, si no se tomaban acciones de racionamiento, en las primeras semanas de abril podría haber un colapso eléctrico. "Yo estoy dirigiendo la batalla en este sentido. Y voy a morir en el intento", ha llegado a manifestarles en confidencia el ministro a los principales representantes de esta industria, contradiciendo sus opiniones públicas, que siempre apuntan a los sabotajes.

La situación en el embalse de El Guri ya bordea el caos. Según recoge el diario El Nacional, que cita la opinión de expertos como el ingeniero eléctrico José Aguilar, "la cota del colapso fulminante es de 240 msnm porque, en ese registro inminente, las máquinas del Guri dejarán de trabajar". Aguilar, que conoce al detalle el funcionamiento de la represa, menciona que ya hay unidades (la 13 y la 14) que están 10 metros más abajo, por lo tanto, inutilizables.

"Las máquinas presentan daños por entrada de burbujas que impactan y causan mini explosiones, originando desprendimientos de metales", denuncia el experto. Lo que sigue en las próximas semanas es un escenario dramático: los especialistas prevén racionamientos energéticos que durarán entre 10 y 12 horas diarias. Semanalmente, es probable que se supriman en el país entre 2.000 y 3.000 megavatios.