Además de cambios políticos históricos, la 'Primavera Árabe' también está dando un espectáculo televisivo digno de 'prime time'. Durante un debate sobre la situación en la vecina Siria, dos políticos libaneses se enzarzaron en una discusión que casi acaba a sillazo limpio.
A Fayez Shukur, líder de la rama libanesa del Partido Árabe Socialista Baaz –el mismo al que pertenece Bashar al Asad en Siria–, no le sentó nada bien que el opositor Mustafa Alloush asegurase que su jefe es "un mentiroso" y que no se cree "ni una palabra de lo que dice".
Ante lo que consideró una grave afrenta, Shukur perdió los papeles. Se levantó de su silla, la agarró con fuerza e intentó agredir con ella a su rival. Sólo la intervención del moderador impidió que un simple programa de televisión acabase con sangre derramada, como sucede desde hace meses en las calles de Siria.
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