Bienvenidos al circo minero de Atacama

Cientos de periodistas -algunos medios hablan de más de mil profesionales-, mil millones de espectadores según algunas fuentes y las palabras "capsule" o "miners rescue" como trending topics en Twitter muestran el gran evento mediático en el que se ha convertido el salvamento de los 33 mineros de Chile.

Transmisión 24 horas. El rescate se emite en directo en una señal de televisión abierta disponible para los internautas, así como para usuarios de dispositivos móviles blackberry y con sistema Android. Las imágenes de la televisión estatal chilena también incluyen comunicaciones desde el fondo de la mina, que permiten seguir el operativo minuto a minuto. Medios de EEUU, China, los países hispanoamericanos, europeos y de prácticamente todo el mundo siguen muy de cerca el operativo de rescate.

"¡Chi - chi - chí! ¡Le-le-lé! ¡Los mineros de Chile!" Con este grito de guerra reciben a los mineros de Chile atrapados en la mina de San José cuando llegan a la superficie.

Intervención de la NASA. El Gobierno de Chile pidió ayuda a la Agencia Espacial de EEUU para afrontar el rescate y la atención de los mineros. Dos médicos, un psicólogo y un ingeniero han estado asesorando al equipo de rescate chileno durante la estancia de los 33 mineros en el refugio de la mina de San José a casi 700 metros de profundidad. Los consejos que el jefe del equipo de psicólogos chileno, Alberto Iturra, ha dado a los mineros son similares a los que reciben los astronautas de la NASA: moderar sus emociones, transmitir a sus seres queridos su cariño al salir a la superficie, estar preparados para una readaptación a la vida en común, etc.

Ascenso en una cápsula claustrofóbica. Con un diámetro de 53 centímetros y menos de dos metros de altura en su interior, las tres cápsulas de rescate bautizadas como Fénix I, II y III, son la salvación de los mineros. Suben de uno en uno a través de un ducto con el espacio justo para que quepa la cápsula. No están solos del todo. A través de un pinganillo están en comunicación con el exterior. Además, disponen de tanques de oxígeno. El ascenso dura alrededor de 15 minutos. Y eso que al principio se calculó que tardaría una hora.

Trajes ignífugos y gafas de sol. Los mineros no entran en la cápsula de rescate con una vestimenta cualquiera. Llevan un equipo de protección individual que evita posibles llamas debido a las fricciones de la cápsula. Además, también llevan una gafas de sol de alta protección para evitar posibles daños en la vista después de pasar entre 69 y 70 días en la penumbra.

Mario Sepúlveda, el showman. Cada uno de los mineros ha adquirido un papel durante su encierro involuntario. Sepúlveda, el segundo de los mineros en salir a la superficie, ha sorprendido por su energía y alegría desbordada. Repartió golpes a diestro y siniestro, incluido el presidente chileno Sebastián Piñera y luego animó a los que ahí le esperaban a cantar con él el grito de guerra. Ha dicho que "nací para morir amarradito al yugo".

Récord mundial. El último minero en subir ostentará el récord mundial de estancia bajo tierra. En los últimos días, varios mineros se habían ofrecido para quedarse hasta el final en la mina. Según las autoridades chilenas era para ceder el paso a sus compañeros. Otros dicen que se peleaban por el récord mundial. El récord anterior era de unos mineros chinos que sobrevivieron a un derrumbe durante 25 días en el año 2009.

Les espera una visita al Bernabéu. Son muchos los homenajes y regalos que esperan ahora a los 33 mineros. El Real Madrid anunció cuando aún esperaban en su refugio a la llegada de la máquina perforadora T-130 que les invitaría a presenciar un partido en el estadio Santiago Bernabéu de la capital española. Por otra parte, el Gobierno chileno les condecorará como "Héroes del Bicentenario" de la independencia de España, que varios países latinoamericanos -incluido Chile- celebran este año.