Cancelada la conferencia de la resistencia iraquí de Gijón

  • Gijón.- La Campaña Estatal contra la Ocupación y por la Soberanía de Irak (CEOSI) ha desconvocado la conferencia de la oposición política al actual gobierno iraquí que iba a celebrarse mañana y pasado en Gijón, y el día 21 en Madrid, por las amenazas de muerte y de atentados contra instituciones que aseguran haber recibido miembros de la organización y sus familiares.

Cancelada por amenazas la conferencia de la resistencia iraquí en Gijón
Cancelada por amenazas la conferencia de la resistencia iraquí en Gijón

Gijón.- La Campaña Estatal contra la Ocupación y por la Soberanía de Irak (CEOSI) ha desconvocado la conferencia de la oposición política al actual gobierno iraquí que iba a celebrarse mañana y pasado en Gijón, y el día 21 en Madrid, por las amenazas de muerte y de atentados contra instituciones que aseguran haber recibido miembros de la organización y sus familiares.

"Las amenazas han sido transmitidas directamente por las autoridades iraquíes al Gobierno español exigiendo la cancelación de la conferencia", han asegurado los organizadores en un comunicado hecho público durante una rueda de prensa celebrada hoy en Gijón.

El texto asegura que "cabe suponer que la ejecución de dichas amenazas correspondería a grupos paramilitares vinculados al propio gobierno de Nuri al Maliki".

Según la CEOSI, el Gobierno español "no ha tomado medida eficaz alguna" ante estos hechos, por lo que los organizadores aseguran que se han visto forzados a suspender este acto.

El anuncio se ha hecho en una rueda de prensa en la que estaban presentes el directo de la Agencia Asturiana de Cooperación, Rafael Palacios y el concejal de Cooperación Internacional del Ayuntamiento de Gijón, Jesús Montes Estrada, ambos de IU, el representante de la CEOSI, Carlos Barea y el del Comité de Solidaridad con la Causa Árabe, Patricio Suárez.

Esta conferencia ha sido objeto de polémica en las últimas semanas, ya que el Gobierno iraquí advirtió de que iban a participar personas buscadas por la justicia y de que su celebración podía dañar los lazos bilaterales con España, que decidió no conceder visados a una parte de los delegados iraquíes.

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