Egipto responde a la muerte de 21 rehenes y bombardea varias posiciones del 'EI'

El Ejército de Egipto ha asegurado haber bombardeado varias posiciones del grupo yihadista Estado Islámico en Libia, horas después de que la formación anunciara la ejecución de 21 egipcios coptos.

En su comunicado, el Ejército ha asegurado que los ataques han tenido como objetivo "varias áreas de entrenamiento y de almacenamiento de armas y municiones en territorio libio", según ha informado la radiotelevisión estatal egipcia, ERTU.Al Sisi advierte que se reserva el derecho a responder a los ataques

El presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, ha declarado que su país "se reserva el derecho a responder como le parezca oportuno" a las ejecuciones de 21 cristianos a manos del Estado Islámico en Libia.

El mandatario ha agregado que el Consejo Nacional de Defensa se reunió para decidir qué tipo de acciones tomar en respuesta, al tiempo que ha ordenado al Gobierno que de "apoyo total" a los familiares de las víctimas, según ha informado el diario egipcio 'Al Ahram'.

Asimismo, ha ordenado endurecer la prohibición de viaje para los ciudadanos egipcios a Libia, resaltando que se están tomando las medidas necesarias para conseguir que aquellos que lo deseen puedan abandonar el país y regresar a territorio egipcio.

Por último, ha pedido a su ministro de Exteriores, Sameh Shukri, que viaje a Nueva York para reunirse con el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas "para presentar a la comunidad internacional ante su responsabilidad" tras las decapitaciones.

Al Sisi ha hecho estas declaraciones después de que la Iglesia egipcia confirmara la muerte de los rehenes, secuestrados en Sirte (Libia), y decapitados como exhiben las imágenes de un vídeo publicado por la organización yihadista.

Las reacciones de condolencias ya han comenzado. El primer ministro británico, David Cameron, ha condenado este "acto cruel y bárbaro" a través de su cuenta de Twitter.

El presidente de Francia, François Hollande, ha reprochado este acto de "salvajismo" que pone de manifiesto "la amplitud de las operaciones de Estado Islámico en Libia", a través de un comunicado del Elíseo.